El descredito tendrá un precio
viernes 22 de noviembre de 2013, 11:42h
Llegar al fin de
semana manteniendo cuarto y mitad de optimismo, esperanza, fe o como usted lo
quiera llamar, es ya una mérito en este país en el que cada día se podría
resumir en la frase atribuida al torero "Guerrita" pero que en realidad parece
ser que es del diplomático francés Charles Maurice de Talleyrand: "Lo que no puede ser no puede ser y además
es imposible". Pues así estamos.
Don
Oriol Junqueras (ERC) amenaza en Bruselas con
paralizar la economía catalana durante una semana y a ver qué pasa en España.
Este es Junqueras, si señor, con un par y cierta ensoñación porque sólo dos
personas en el mundo podrían decir algo así: Nicolás Maduro y don Oriol. La
diferencia es que Maduro es capaz hacerlo y me temo que don Oriol tendría
ciertas dificultades.
Y a
ya que estamos en Cataluña. Artur Mas, que va de mal en peor, pretende ahora
que todos los españoles paguemos su TV3 y aseguran en CIU que la Constitución
les avala. Hombre, un poco de seriedad: si ponemos la Constitución por testigo,
habrá que ponerla para todo, no sólo para pagar su TV3. Usted ya me entiende
señor Más.
Y
nos enteramos por las redes sociales que Felipe González (no lo creo) o su
editorial pidió a la portavoz y guionista eventual de la plataforma de
Afectados por las Hipotecas, Ada Colau, que presentara el libro de memorias del
ex presidente. La respuesta de la Colau fue tajante en tuiter: "Felipe
González, q dijo q en @LA_PAH acosamos a niños, me pide q
presente su libro, para promocionarlo aunque sea con polémica #asco".
Impresiona sobre
todo el final, el "hashtag" (o almohadilla) de "asco". Tampoco es eso, mujer.
Y yo
de los nervios porque debo ser el único español al que no ha espiado
(presuntamente) la empresa Método 3.
Y ya
con menos gracia dos historias más para no dormir. En primer lugar los extraños
arrepentimientos del ex ministro Solbes que le llevan ahora a confesar,
tranquilamente, que nos mintió plenamente consciente a todos los españoles. No
se trata ya de hablar del desencuentro con Zapatero ni de juzgar al presidente
por su desidia; es que lo de Solbes resulta absolutamente inmoral cuando
aseguraba: "Hablan de crisis y recesión, nada más alejado de la
realidad". Y mientras decía esto en público, ahora confiesa que él sabía todo
lo contrario. ¿Pero hasta dónde hemos llegado?
Pues
hemos llegado hasta el inmoral espectáculo de ver como con mayoría absoluta, el
Gobierno de Rajoy cierra con el PSOE el nuevo Consejo General de un Poder Judicial
más politizado que nunca. Esto, que ya de por si venía siendo escandaloso, se
agrava si se recuerda que fue el propio PP quien en su programa electoral
proponía "una reforma del sistema de elección del los vocales del CGPJ" Pués ya
lo ven. Y para este despropósito no hay herencias que valgan, ni hombres de
negro, ni primas de riesgo. No lo han hecho y punto.
Así
-más todo los que me dejo en el teclado- no puede funcionar un país serio.
Estas no son maneras para regenerar la democracia, al contrario; así sólo se
incrusta más y más el descrédito en el sistema y eso, tarde o temprano, tiene
un precio.