Recientemente hemos conocido una noticia, que no por esperada,
provoca un incremento, muy comprensible por otra parte, de la alarma social e
indignación entre los hombres y mujeres de bien de Castilla-La Mancha.
Me refiero a la imputación del juez de la Audiencia Nacional,
Pablo Ruz, del que fuera gerente del Partido Popular de Castilla-La Mancha,
José Ángel Cañas, por el supuesto cobro de una comisión de 200.000 euros por la adjudicación de los servicios de limpieza de Toledo a una filial de Sacyr. Dolores Cospedal vuelve a situarse
en el ojo del huracán "Bárcenas".
La presidenta autonómica y secretaria General del PP ha
manifestado, al conocer la noticia de la imputación, que así "sabremos ya de una vez que lo que es
verdad es verdad y lo que siempre ha sido mentira siempre ha sido
mentira".
Pero para saber la verdad, y que no quede emborronada por la
sucesión de los nuevos acontecimientos, debemos conocer los hechos presentes y
pasados. Para ello, resulta imprescindible la memoria, el recuerdo de todo lo
que se ha dicho y hecho. En contraposición, el olvido resulta imprescindible
para el mentiroso, y es buscado por éste en todo momento, triunfando cuando la
desmemoria alcanza a la mayoría, o incluso a todo el pueblo.
Pues bien, para saber lo que es verdad y lo que es mentira,
debemos mirar hacia atrás y recordar algunos sucesos pasados.
Partamos de una afirmación sobre la que existe suficiente
consenso. Bárcenas ingresó en la cárcel imputado por presunto delito fiscal, y
porque no había dado (al menos al principio) una explicación razonable de cómo
había obtenido los millones de euros y bienes que se le ha encontrado
repartidos por diversos puntos del planeta. Siendo cierto que esto es de su
exclusiva responsabilidad, no es menos cierto, el derecho, e incluso la
obligación, que todos nosotros tenemos de conocer como ha amasado tan enorme
fortuna, por lo que nos pudiera afectar.
Pero, por este último motivo, tiene especial relevancia las
declaraciones de Bárcenas en sede judicial, en las que dice que el Partido
Popular lleva 20 años financiándose ilegalmente y que a cambio se hacían
concesiones de obras o servicios desde instituciones públicas gobernadas por
miembros del PP a favor de los "financiadores".
Para acercarnos a la verdad de estas afirmaciones, debemos hacer
el ejercicio de memoria al que anteriormente me refería.
Durante estos últimos años, desde que se destapo el caso Gürtel,
el PP ha realizado manifestaciones y tomado decisiones que con el transcurso
del tiempo han ido variando ¿Cuáles serán las verdaderas, las pasadas o las
actuales? En la adopción de estas tomas de posturas, la responsabilidad de
Dolores Cospedal, como Secretaria General, ha sido de máximo nivel.
Cabe recordar que el 2 de abril de 2009, Mariano Rajoy aseveraba
que nadie podría probar que Bárcenas no es inocente. A pesar de ello, hoy está
en la cárcel, e imputado por muchos más delitos que los señalados
anteriormente.
Desde que se inició el caso Gürtel, y hasta hace relativamente
poco tiempo, Bárcenas ha sido amparado por el PP. Imputado en julio de 2009, el
PP le facilitó los abogados para la defensa; conservó despacho y plaza de
garaje en Génova; y aunque pretendieran negar esta relación con la disparatada
y absurda explicación del despido en diferido, lo cierto es que estuvo cobrando
20.000 euros mensuales entre 2011 y 2012 y ha estado de alta en la seguridad
social hasta 31 de enero de 2013.
Igualmente, hay que recordar, aunque sea brevemente, otros hitos
como que la auditoría que hizo el PP fue interna, rechazando el ofrecimiento
realizado por los Técnicos del Ministerio de Hacienda (GESTHA) para realizar un
"examen exhaustivo" de las cuentas del partido; que aunque se amparen
diciendo que el Tribunal de Cuentas es conocedor de su contabilidad, éste ha
reconocido que no tiene medios para auditar a los partidos políticos en
profundidad; que han borrado de forma irrecuperable discos duros que suponían
importantes pruebas para el esclarecimiento del asunto; y un largo etcétera con
el que no pretendo aburrirles.
Esta sucesión de hechos, que evidencia los esfuerzos realizados
por PP para amparar a Luis Bárcenas, pretenden que sean olvidados, intentando
hacernos creer que su actuación se encuentra totalmente desvinculada del
partido, y de los que lo han dirigido estos últimos años, queriendo que
olvidemos que era el tesorero al que habían estado pagando por ello un salario
hasta fechas recientes.
Ahora, cuando el cerco se va cerrando cada vez más, y conforme
vamos conociendo más datos, quieren que Bárcenas sea el chivo expiatorio de una
trama de la que tan solo él forma parte, de la que nadie sabía nada y de la que
tan solo él se beneficio. Es evidente el esfuerzo titánico que debemos hacer
para aceptar esta nueva versión.
Pero la realidad es que si fueran ciertas las manifestaciones que
de Bárcenas se han publicado estaríamos ante una supuesta ilegalidad de la
financiación del PP, y sería muy grave que se hubieran ganado elecciones
financiándose de esta forma. De ser cierto, reitero, pondría de manifiesto la
ilegalidad y la ilegitimidad de los gobiernos del PP.
Nuestra región no se encuentra al margen, ya que Dolores Cospedal
y el PP de Castilla-La Mancha, han sido de los pocos nombres propios que han
sido citados por Luis Bárcenas en sede judicial. "A Rajoy y Cospedal les hice entregas en efectivo en 2009 y
2010", ha dicho Bárcenas ante el juez según una de las acusaciones.
Fue, según ha dicho, en marzo de 2010, cuando entregó 25.000 euros al
presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y otros 25.000 a la secretaria general
del PP, María Dolores de Cospedal, en concepto de sobresueldos y en billetes de
500.
Pero también ha aparecido el primer justificante de los que
Cospedal negaba que pudieran existir, y ha resultado que fue firmado,
supuestamente, por el que fue gerente del PP de Castilla La Mancha.
Y esto nos vuelve a llevar al principio del artículo, y de la
necesidad de conocer la verdad, de no dejarnos llevar por las últimas
ocurrencias ofrecidas a la prensa, y de recordar. Ya comprobaremos si José
Ángel Cañas es capaz de recordar de donde provenían esos 200.000 euros, y de recordar
cual fue su destino, y también de recordar que anotaciones contables se
realizaron. Sería deseable que así fuera, porque si no, continuará existiendo
una deuda con la ciudadanía consistente en saber toda la verdad.
Pero también todos nosotros debemos recordar para comprender y
poder decidir. Y si hay algo que vamos comprendiendo de todo lo que esta
sucediendo en torno a la querella de Bárcenas es que no puede quedarse sólo en
el pago de unos sobresueldos. Que lo que hay detrás de esos sobresueldos, y de
los papeles de Bárcenas, es lo injusto y absurdo de un modelo económico, que
tiene por objetivo principal el incremento constante del beneficio sin que
importe a costa de qué se gane dinero, y de los engaños y mentiras o los
riesgos a los que se someta a las personas. El resultado de ese modelo es la
ilegítima crisis que ahora estamos pagando los que nunca la creamos.
**Juan Ramón Crespo
Vicecoordinador de IU de Castilla-La Mancha.