Se
disparan los rumores sobre la renovación de las instituciones europeas
Europa, fuera de rumbo: lanzan el bulo de una candidatura de Zapatero para presidir la Comisión Europea
jueves 05 de septiembre de 2013, 16:57h
Se
ha hecho circular el nombre de Rodríguez Zapatero como posible candidato para
sustituir a Durao Barroso al frente de la Comisión Europea. Es uno de los bulos
más notables de los que se están lanzando de cara a la renovación del
Parlamento Europeo y de los cargos institucionales en la UE que tendrá lugar
entre mayo y noviembre de 2014. Ahora bien, algunos políticos ya se están
posicionando para ocupar un puesto de comisario en la nueva Comisión Europea...
otros, para presidir el Parlamento, el Consejo Europeo y hasta la propia
Comisión.
Entre
el 22 y el 25 de mayo de 2014, los 28 países que conforman la Unión Europea
(UE) celebrarán elecciones para elegir al nuevo Parlamento Europeo. En España,
estos comicios se celebrarán el 25 de mayo. De los resultados que obtengan en
su conjunto liberales, socialdemócratas, democristianos de centro-derecha...
dependerá quién ocupe los cargos institucionales que hay que renovar: la
Presidencia del Parlamento Europeo y la de la Comisión Europea, además de la
del Consejo Europeo y los 28 comisarios que componen la Comisión.
Dada
la proximidad de los comicios, ya se están posicionando determinados políticos
en todos los países para una nominación a los cargos a repartir, y hay quien soterradamente
-pero con el evidente ánimo de enredar- lanza propuestas desorbitadas, como la
de que el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero podría ser el
candidato de la socialdemocracia para sustituir al portugués José Manuel Durao
Barroso al frente de la Comisión Europea.
Movimientos entre los partidos y grupos europeos
Como
es sabido, la elección del presidente de la Comisión, un cargo realmente ejecutivo
en la UE, se diferencia netamente del proceso de designación del resto de
miembros del Colegio de Comisarios. Tiene lugar antes que cualquier otro y, a
resultas del mismo, su titular es el único legitimado democráticamente de
manera individualizada y directa por su elección parlamentaria.
De
cara a esa elección, que se producirá en septiembre de 2014, ya se están detectando
movimientos entre las principales corrientes políticas europeas. Entre los liberales
hay quienes se decantan por el finlandés Olli Rehn, actual vicepresidente y comisario
europeo de Asuntos Económicos y Monetarios.
En
la socialdemocracia existe un candidato aparentemente decidido: el actual presidente
del Parlamento Europeo, el alemán Martin Schulz, según anunció el pasado mes de
junio en Sofía el presidente del Partido Socialista Europeo (PSE), el búlgaro
Sergei Stanishev, en una rueda de prensa durante el Consejo de la formación
paneuropea.
Pero
desde ese grupo de socialistas y socialdemócratas es desde donde ha surgido el
rumor -o más bien bulo total- de que sería bueno que el candidato fuera un
expresidente de un país del Mediterráneo, y alguien ha susurrado de forma
increíble el nombre de Rodríguez Zapatero. No existe ninguna posibilidad para
esta nominación, pero, en fin, todo dependerá de las listas que se presenten a
los comicios de mayo de 2014 y los resultados electorales que obtenga en total el
grupo del Partido Socialista Europeo (PSE).
La
incógnita del ministro Arias Cañete
Por
su parte, en el Partido Popular Europeo (PPE), al que está adscrito el Partido
Popular de Rajoy, no hay un candidato plenamente decidido, aunque se hacen varias
apuestas. Por un lado, existe la posibilidad de aceptar la candidatura del
finlandés Olli Rehn, pero también 'suena' la del primer ministro actual finlandés,
Jyrki Katainen.
En
todo caso, ahora mismo hay fuertes peleas por el liderazgo. No es necesario ser
el número uno en la lista al Europarlamento de un partido político -y ni siquiera
ser eurodiputado- para poder ser elegible como candidato a la Presidencia de la
Comisión. Pero los partidos nacionales suelen optar por incluir como números
uno a quienes pretenden presidir la Comisión Europea por 'cuestión de prestigio'
y para hacer más fuerza a la hora de presentar su candidatura ante el grupo
correspondiente al que se esté adscrito.
Así
las cosas, en el caso español, por ejemplo, se está lanzando el rumor de que el
actual ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, podría ser un candidato
perfecto, pero no ya como Comisario en sustitución de Joaquín Almunia, sino de
presidente de la Comisión en sustitución de Durao Barroso. La posibilidad de
presentarlo como tal es tan real, que algunos dentro del PP apuestan porque
Cañete sea el número uno por el PP en las elecciones al Parlamento Europeo,
desplazando a Jaime Mayor Oreja y a otros postulantes.
No
obstante, la rumorología ha nombrado a Arias Cañete casi de todo: comisario en
sustitución de Almunia; presidente de la Comisión Europea; número uno en las
listas del PP al Parlamento Europeo, y hasta candidato a la Presidencia de la
Junta de Andalucía, reemplazando en la candidatura a Javier Arenas. Casi nada. El ministro, por su parte, se deja querer y no
suelta prenda sobre sus deseos o sobre su futuro político.
Pero,
por otro lado, también hay movimientos paralelos para sustituir al presidente
del Consejo Europeo, el democristiano belga Herman Van Rompuy, cuyo mandato
concluye en noviembre de 2014. En fin, que la capital comunitaria es hoy en día
una 'central de bulos y rumores'.
Así
es el nuevo sistema de elección del presidente de la Comisión
Por
vez primera será el Parlamento Europeo el que elija al nuevo presidente de la
Comisión Europea que ha de sustituir a Durao Barroso. El proceso se iniciará en
septiembre de 2014, una vez que en el mes de junio se haya constituido el nuevo
Parlamento Europeo. En ese momento, el Consejo Europeo iniciará, por medio de
su presidente, el democristiano belga Herman Van Rompuy, una ronda de consultas
con las fuerzas políticas resultantes de las elecciones al mismo. En esta tarea
contará con el apoyo y la mediación del nuevo Presidente del Parlamento Europeo,
es decir, del sustituto del socialdemócrata alemán Martin Schulz.
Teniendo
en cuenta dichas consultas y el resultado de las elecciones, Van Rompuy elevará
al mismo una propuesta y la someterá a su consideración. El candidato propuesto
por el Consejo Europeo comparecerá ante el Parlamento para exponer su programa
de gobierno para un mandato quinquenal.
Tras
la comparecencia y el debate, el Parlamento someterá a votación la candidatura:
si el candidato obtuviese la confianza de la Cámara, se considerará elegido presidente
de la Comisión. Si le fuere denegada, el Consejo Europeo deberá reiniciar la
fase de consultas. Para obtener la confianza parlamentaria, el Presidente
designado requiere de la mayoría absoluta de los miembros de la Cámara
favorable a su elección. Tras la investidura parlamentaria, el candidato así
votado obtiene la condición de Presidente Electo.
Concluido
el proceso de designación y asignación de carteras a los demás comisarios, la
Comisión se somete colegiadamente al voto de aprobación conjunta ante el
Parlamento Europeo, que lo otorgará por mayoría simple.
A
continuación, el Consejo Europeo procederá al nombramiento de la Comisión por
medio de decisión adoptada por mayoría cualificada. El Presidente y los demás
comisarios asumen así, tras prestar solemne juramento sobre los Tratados, la
plena posesión de sus funciones.