Censura... o lo que es peor, autocensura. Es lo que
ha ocurrido con dos grandes agencias de la comunicación mundial, AFP y Reuters,
que se han 'autocensurado' y han querido practicar la 'censura obligatoria'
pidiendo a sus clientes que no difundan una foto del presidente francés, el
belicoso François Hollande, por no salir demasiado favorecido. En realidad, por
haber sacado una al presidente socialista que quiere una guerra en Oriente
Medio en su estado natural.
La incomprensible historia de esta peculiar censura
informativa es la siguiente: con ocasión de la vuelta a las clases, el señor de
la guerra François Hollande visitó un colegio en Denain, al norte de Francia.
Allí posó ante los medios delante de una pizarra en la que se puede leer
"Hoy es la vuelta al cole".
Las agencias informativas AFP y Reuters vendieron
la imagen a los medios con la leyenda "Durante una visita al colegio
Michelet en Denain, el 3 de septiembre de 2013, François Hollande sonríe,
presidiendo una mesa redonda sobre la reforma escolar prevista por el
Gobierno". En la fotografía, como pueden ver abajo con más detalle, salía
François Hollande en estado natural, es decir, sin retoques, y por ello, escasamente favorecido.
Ahora bien, después de enviarla, las agencias
tuvieron que pedir que no fueran utilizadas esas fotos, enviando una nueva
imagen tachada y con el título "Mandatory kill", que se suele
traducir como "Borrado obligatorio"; un 'mandatory' poco frecuente, dado
que ese tipo de mandatos suelen estar más relacionados con errores de
identificación o dificultades con la propiedad intelectual de las imágenes
suministradas.
Las agencias dicen -por decir- que el borrado -más
bien censura- exigido no es a petición del Elíseo, sino que responde a una
"decisión editorial" de las agencias y pedían "por favor, que la retiraran
de todos los sistemas". No obstatne, y a pesar de la prohibición, la
imagen de Hollande con cara de tonto se filtró a las redes sociales y son
muchos los usuarios que la han compartido en Twitter.