"En los tiempos que corren, pensamos que
uniendo esfuerzos bajo el paraguas de una Federación
de Comercio Provincial fuerte, activa, dinámica y que englobe a todo el sector comercial, por
supuesto, desde parámetros tan importantes como la libertad que hemos de tener
las asociaciones empresariales para construirla desde nuestras necesidades,
puede ser muy beneficioso, sobre todo para el comercio minorista, que es el que
está más desprotegido", explica Angela Adán, presidenta del gremio en Ciudad Real.
Un sector del que, asegura, está
atravesando por dificultades pese a crear empleo estable y con potencial para
seguir generándolo en el futuro.
Son los motivos que esgrime este
colectivo empresarial para crear una Federación Provincial de Comercio que
consideran "muy necesaria en esta provincia, si tenemos en cuenta que las
medidas que las diferentes administraciones están poniendo en marcha para
dinamizar el comercio, solo serán efectivas desde el asociacionismo".
En este sentido recuerda que una de las líneas de actuación de la Junta de Castilla-La
Mancha, el Plan de Inversión y Creación de Empleo, PICE, "busca poner en marcha un conjunto
de medidas para activar y revitalizar el sector económico comercial a través
del fomento del asociacionismo, la modernización del pequeño comercio y la
hostelería, la promoción de centros comerciales abiertos, la incentivación a
emprendedores y comerciantes, el turismo y el urbanismo comercial".
Por eso entienden que "en unos
momentos tan críticos, ha de apostarse por la unidad empresarial, dejando a un
lado intereses espurios, discriminaciones gratuitas, articulando una Federación
de Comercio Provincial, fuerte y sin fisuras, unida e integrada por todas las
asociaciones que tengamos en el comercio nuestra actividad principal".
Una asociación, añaden "que emane
de la voluntad libre y de la necesidad de estas asociaciones, que trabaje en
esta línea, poniendo en valor nuestras empresas, implementando acciones desde
el ámbito local hasta el regional, así como acciones ligadas a una actividad
como el turismo y buscando sinergias entre las diferentes asociaciones que se
dediquen a ello".
Adaptarse a un cambio de modelo comercial
Y es que en la Asociación de Joyeros, Plateros y Relojeros de
Ciudad Real (AJPR) creen que "no solo la crisis económica está afectando
negativamente al comercio". En su opinión existe "un punto de inflexión, un cambio del modelo
comercial, un proceso de evolución en el que las empresas nos tenemos que
adaptar a las nuevas condiciones: tecnológicas, legislativas y a las nuevas pautas de consumo".
En este aspecto, señalan que pasar
de un entorno más regulado a otro más flexible que apuesta por la libertad de
empresa, "hace que las empresas pequeñas seamos más vulnerables frente a
grandes grupos de distribución y grandes superficies, que operan de entrada con
una gran ventaja competitiva en multitud aspectos, convenios colectivos
específicos más favorables, economías de escala en gestión o el más fácil
acceso al crédito".
Defender el pequeño comercio
La Asociación Provincial de Joyeros, Plateros y Relojeros de Ciudad Real
(AEJPR), cuenta con medio centenar de asociados y se declara "comprometida y a favor de todas
aquellas acciones que puedan redundar en el interés general, de nuestro sector
y por supuesto de todo el sector comercial del que formamos parte".
Ahora se plantean la necesidad de
"buscar sinergias que puedan poner en valor nuestras empresas y nuestros
productos", asegura Angela Adán presidenta de la AEJPR.
La AJPR recuerda que el gremio de
joyeros fue uno de los primeros que
entró en crisis y uno de los últimos que saldrá de ella.
Anuncian que se sumarán a
campañas de apoyo al pequeño comercio, que surjan en cualquier localidad de
esta provincia, "puesto que formamos parte de él, que hagan ver a los
consumidores que comprar en los establecimientos comerciales de sus respectivas
poblaciones, redunda en generar riqueza y empleo local, pues cada euro gastado
de esta forma tiene un efecto multiplicador sobre todos los sectores
productivos".