Con la verdad por delante
miércoles 03 de julio de 2013, 19:25h
Todos los partidos, todos, tienen la
obligación urgente de acabar con el espectáculo insoportable de la
corrupción en sus filas. Sí, ya sé que hay partidos como UPyD, que por
ahora puede presumir de no tener ni un solo caso de corrupción, pero más
allá de que haya excepciones, la clase política no puede seguir de
brazos cruzados ante los escándalos con que día si y día también nos
desayunamos los ciudadanos.
En mi opinión uno de los problemas que tienen los partidos es que
se empecinan en mirar hacia otro lado cuando la corrupción les salpica
en vez de apartar de inmediato a los presuntos corruptos.
Por ejemplo, resulta insólito como los populares con el caso
Bárcenas hacen como si no conocieran de nada al que hasta poco era su
tesorero amén de senador. Hacen como si Bárcenas fuera un personaje
ajeno al partido, poco más que un ectoplasma. Y la verdad es que
resultan patéticos los dirigentes del PP que se empeñan en intentar que
los ciudadanos nos creamos que Bárcenas no tienen nada que ver con su
partido.
En vez de decir la verdad elaboran excusas tan pueriles que
resultan ofensivas. O incluso se atreven a decir que ellos están para
arreglar el problema económico y que de Bárcenas poco tienen que decir.
Hombre, pues sí, es verdad, la obligación es gobernar e intentar
sacar a España de la crisis pero también tener un techo transparente y
desde luego no estar inmersos en un caso de presunta corrupción como es
el caso Gürtel con su derivada en el caso Bárcenas.
El PSOE tampoco se libra de esa actitud de hacer que determinados
casos de corrupción no tienen que ver con su partido. Por ejemplo con el
caso de los ERE de Andalucía estamos asistiendo a una tragicomedia
igual de insólita que el caso Bárcenas. Y es que no hay un solo
responsable de la Junta de Andalucía que reconozca que lo de los Ere no
se habría podido hacer si no hubiese una decisión política por medio.
Ahora la juez Alaya ha imputado a la exministra Magdalena Álvarez que en
su día fue consejera de Economía de la Junta y no se descarta que la
jueza pueda dar alguna sorpresa más. Pero desde que estalló este
escándalo en la Junta hacen como si no tuvieran nada que ver con el
caso, una pretensión que resulta cuanto menos increíble.
Estos y otros casos, como los de la familia Pujol el Cataluña, por
no ir más lejos, están provocando un sentimiento de decepción entre los
ciudadanos con respecto a nuestro sistema.
Por eso insisto en que es urgente que los partidos dejen de meter
la cabeza debajo del ala y asuman sus responsabilidades caiga quien
caiga y sobre todo no intenten tomarnos a los ciudadanos por tontos.
O realmente el sistema se depura o el sentimiento de decepción y
frustración continuará creciendo. Sí, los políticos están para gobernar y
arreglar los problemas pero también para comportarse honradamente y dar
ejemplo. Ya digo que en el caso Gürtel versus Bárcenas, y en el caso de
los ERE, los dos grandes partidos nos deben una explicación.