Tal vez fueron las manos de su padre,
ajadas por el trabajo duro en la Argentina tumultuosa de los años 80, lo que
hizo que Erwin Pérez se decidiera por un camino totalmente opuesto, cercano al
glamur, la música, la televisión, la radio, al éxito, en definitiva. El periodista conductor del programa "No
es lo mismo" siempre supo cómo abrirse oportunidades en el competido mundo de
los espectáculos
Este periodista chileno-argentino de 45
años, y padre de Valentina, de 7, hace varios años se ganó el título de
referente de los músicos emergentes en el mercado de Miami, donde ningún
artista que quiera ser conocido en la industria musical ignora su existencia.
Hoy, ya una personalidad del sur de la
Florida, recuerda el sacrificio de sus padres Gastón y Gregoria, que se mudaron
en 1974 de su Chile natal a Argentina en busca de mayor bienestar, como el
motor de su vida.
Esos años estuvieron marcados por los
golpes de Estado en ambos países, la desilusión de la nueva tierra que estaba
lejos de ser el lugar que sus padres soñaron para él y su hermano Denis (luego
nacería su hermana Silvina), y la paradoja de estar peor a 30 kilómetros de la
cosmopolita Buenos Aires que en La Legua, ese barrio de Santiago considerado el
Harlem chileno.
"Mi padre pasó de ser obrero en una
fábrica en Chile a ser obrero de la construcción en Argentina. Vi cómo se le
partían las manos", insiste.
Pero luego todo eso quedaría atrás, ya
que Pérez comenzó a estudiar periodismo en 1988 en la Universidad Nacional de
Lomas de Zamora y en 1992 se ganó una beca para trabajar en el diario Página
12, de mucho prestigio en ese entonces.
La obtención de la beca puso de
manifiesto las características que luego lo acompañarían en su camino al éxito:
"La facilidad para escribir, soy muy concentrado, doy todo cuando hago algo, y
un poco de suerte siempre tiene que haber", afirma.
En 1994, la carrera de Pérez daría el
gran salto, cuando la investigadora estrella del diario en ese entonces, Susana
Viau (fallecida en marzo de 2013), lo llamó para que la ayude en un caso que
sacudió al país gobernado por Carlos Menem.
La investigación que llevó a cabo el
equipo de Página 12 desató un escándalo que obligó a renunciar a la presidenta
del seguro de salud para jubilados y pensionados, PAMI, Matilde Menéndez.
"Fue como una película. Presencié abuso
de poder y sobornos millonarios para financiar al menemismo", recuerda Pérez.
Pero, con el tiempo, los rumores de crisis
en Página 12 hicieron que eligiera el retiro voluntario y con ese dinero
lanzarse a la aventura.
El viaje a Estados
Unidos
El rastro de un viejo amor lo trajo a Estados
Unidos, y a principios de 1996 llegó a Miami con $100 en el bolsillo.
Si bien nunca encontró a su amada,
decidió quedarse en esta ciudad, que ahora considera ideal para emprendedores,
sobre todo en el mundo del espectáculo.
Su primer trabajo fue de lavaplatos en
un restaurante de Miami Beach con el profético nombre de Lucky Change (Cambio
de Suerte).
Pero, consciente de que no le gustaba el
trabajo pesado, se preguntaba cómo hacer para volver a su oficio de periodista.
Así, contactó a Página 12 y al diario La
Nación de Chile, que aceptaron su propuesta de mandarles notas de MTV Unplugged, un nicho no explotado por
los periódicos australes.
Un día, cubriendo un evento le
presentaron a Armando Correa, actual director de la revista People En Español,
quien le dio la tarjeta de Olga Connor, encargada del suplemento Viernes del
diario El Nuevo Herald, donde empezó a trabajar de manera freelance.
Califica su primera nota como "una
picardía", ya que tuvo la iniciativa de entrevistar a un grupo ecuatoriano sin
consultar a Connor.
Destaca que siempre trataba de proponer
notas, buscar nombres grandes que le permitieran destacarse. Fue con esa
determinación que entrevistó a Don Francisco, el famoso presentador de Sábado
Gigante, de la cadena Univisión.
En 2001 tuvo la idea de tener un programa
en la radio sin cobrar sueldo, con el fin de reinventarse y seguir aprendiendo
y conociendo artistas.
"Me di cuenta que nadie me iba a venir a
buscar y que es uno el que tiene que ir a golpear puertas", explica Pérez.
La Esencia
Pero fue en 2003 que su perfil se
terminaría de definir por el lado de los artistas, cuando empezó a organizar shows independientes de cantautores
emergentes que "nadie entrevistaba".
Así, los conciertos Esencia, en el bar
Hoy Como Ayer de la Calle Ocho de la Pequeña Habana se volvieron un clásico de
la ciudad.
"Fue como una bola de nieve", explica,
porque, de tener que llamar a sus amigos para que le llenen el lugar, Esencia
pasó a ser convocante por sí mismo.
En 2005 decidió irse de El Nuevo Herald
y dedicarse a Esencia y a ser publicista de artistas.
Claro que ser PR tenía sus riesgos:
"Cuando me pagó mi primer cliente no sabía si depositar el cheque, porque no
sabía cómo iba a salir todo".
Luego de una época de bonanza, su
constante búsqueda de reinventarse, sumada a un negocio en declive, lo llevó a ofrecerse
a conducir gratis un programa en televisión en el canal Telemiami.
Actualmente, en No es lo mismo entrevista a diversas personalidades de la comunidad
hispana de Miami.
Además, escribe en El Nuevo Herald la
columna "Al vuelo", en People en Español "Lo que suena", es productor del
programa de Jaime Bayly en Mega TV y promociona libros de Editorial Penguin. Y
por supuesto, es publicista de artistas.
Lea también:
-
Todo sobre Emprendedores 2020
-
Canal Emprendedores TV>>
-
Nace el club 'Ruta al 2020': Otra oportunidad para los emprendedores
Te recordamos que...
- Estamos en Twitter
@emprender2020
- Tenemos un hashtag
#Emprendedores2020
- Y en Facebook:
Emprendedores2020