La
canciller alemana, Angela Merkel, dio hace unos días un tirón de orejas al
presidente norteamericano, Barack Obama, por el 'programa Prism' de espionaje
informático. Días atrás se había descubierto cómo los Gobiernos norteamericano
y británico utilizaban sus servicios para espiar a diplomáticos, políticos,
empresas...
Pero esto no es nada nuevo: ¿acaso hemos olvidado la Red Echelon?
Desde finales de los 90 sabemos que nuestras conversaciones, faxes y correos
electrónicos son escaneados por grandes superordenadores al servicio de las
agencias norteamericanas de espionaje. Esa red, que traspasaba fronteras y
vulneraba constituciones, se llamaba 'Echelon'. Ahora ocurre más de lo mismo,
pero bajo el nombre de 'programa Prism'.