Sólo ha concedido el 7% de su presupuesto
El grifo del crédito sigue cerrándose: hasta abril el ICO presta un 70% menos
miércoles 05 de junio de 2013, 07:42h
El crédito no está y los últimos datos auguran una larga espera. El Instituto de Crédito Oficial se ha convertido durante la crisis en la promesa estrella de nuestros gobernantes cuando se les planteaba la cuestión de la falta de financiación. Un problema que desde 2008 se ha llevado por delante a miles de empresas solventes, la mayoría pymes. El problema se está agravando porque los bancos se resisten a facilitar este tipo de operaciones donde no obtienen rentabilidad. Los responsables del organismo aseguran además que se piden menos préstamos por miedo a las recientes turbulencias financieras. Una explicación que muchos no comparten.
En el primer trimestre del año, el ICO ha
concedido apenas el 7% de su presupuesto anual para préstamos de empresa. El
volumen de créditos del Instituto de Crédito Oficial se rebajó un 70% en este
periodo en tasa interanual. Entre enero y marzo, la actividad crediticia del
organismo público se quedó en 1.539 millones de euros, frente a los 5.105
millones de los tres primeros meses de un año antes.
La caída de la cuantía total está en sintonía con el
desplome de las operaciones de préstamos. Éstos bajaron a 23.500 entre enero y
marzo, menos de la mitad de los 57.000 del primer trimestre de 2012. La razón
no estriba en que el ICO cuente con menos presupuesto. En 2013 se mantienen los
22.000 millones de euros del año pasado, lo que ocurre es que el dinero no
llega a las empresas porque los bancos, encargados de asumir los riesgos de
estos préstamos, no los conceden, a pesar de que el ICO es el instrumento
utilizado por el Gobierno para que el crédito llegue a quienes no lo consiguen
por la vía privada.
Desde el organismo público señalan que la caída de la
concesión de créditos se debe a que ha bajado la demanda de las empresas. Así,
las turbulencias financieras del pasado otoño han contribuido a que las
empresas soliciten menos créditos, pero sostienen que ahora la petición se está
recuperando, algo que se comprobará a finales de 2013.
El
Gobierno es consciente de esta situación y está poniendo en marcha otras
medidas. Precisamente ayer, el Ministerio de Economía firmó acuerdos con la
Asociación Española de Banca (AEB) y la Confederación Española de Cajas de
Ahorros (CECA) para favorecer la financiación de pequeñas y medianas empresas
con un compromiso de 10.000 millones de euros de créditos adicionales.
El
objetivo, dicen fuentes oficiales, es favorecer la reactivación del crédito a microempresas,
pequeñas y medianas empresas, un sector que supone el 99,88% del tejido
empresarial y que desempeña un papel clave en la generación de empleo y riqueza
en la economía española. En conjunto, las entidades asociadas a la AEB y a la
CECA se comprometen a poner a disposición de las pymes al menos 10.000 millones
de euros adicionales de crédito respecto a lo concedido en 2012, con especial
atención a la financiación de circulante y nuevos proyectos de inversión.
También se estipula la creación de una Comisión de Seguimiento y Coordinación
con el objetivo de poner en marcha las acciones necesarias para la ejecución
del acuerdo, así como para realizar seguimiento de la consecución de los
objetivos del mismo. Esta comisión estará formada por un representante del
Ministerio de Economía, que también la presidirá, un representante del Banco de
España, y un representante de cada patronal bancaria.
Los autónomos, indignados
Lorenzo Amor, presidente de la Asociación de
Trabajadores Autónomos (ATA), señala que "en estos momentos, el nivel de
crédito que hay es prácticamente inexistente. Si bien es cierto que la demanda
de créditos por parte de autónomos y empresas ha bajado, se debe a que la gente
está cansada de obtener la negativa por respuesta".
Además, para Lorenzo Amor "las líneas de crédito
del ICO no están funcionando" porque "el tejido empresarial lo que
necesita ahora es circulante, es decir, créditos que en muchas ocasiones no
superan los 18.000 euros, un tipo de préstamos que no son interesantes para las
entidades financieras".
La solución pasaría porque "el ICO juegue un
papel más importante en la micro financiación", considera Amor. Los
autónomos proponen reservar una parte de esas líneas que tiene el ICO, y que se
destine a una línea de micro financiación para los pequeños empresarios, con un
nivel de garantía diferenciado, que pueda avalarse desde el sector público.
Así, consideran que ese aval alcance el 50% o 60% del crédito y sólo haya que
cubrir la garantía del resto del préstamo.
El dinero viene de Alemania
A falta de fondos propios, Alemania ya se ha ofrecido
para canalizar el crédito. El Gobierno germano planea destinar unos 1.000
millones de euros a créditos para pequeñas y medianas empresas españolas en el
marco de un paquete de medidas para combatir el desempleo en los países del Sur
de Europa, según revela un documento de trabajo del Ministerio alemán de
Finanzas, que aún debe ser aprobado para su incorporación a los presupuestos de
2014.
El Ministerio prevé que el banco estatal de
desarrollo, KfW, proporcione préstamos por un importe conjunto de 800 millones
de euros, así como otros fondos destinados a mejorar la estructura de capital
de las pymes españolas.
"Este paquete bilateral de ayudas se compone de
distintos instrumentos financieros y alcanza un volumen total de unos 1.000
millones de euros", apunta el Ministerio en el borrador remitido al comité
presupuestario del Bundestag. "Las medidas resultan apropiadas porque
superar las dificultades financieras y de liquidez de las pymes de los países
rescatados es crucial para mantener el empleo y crear nuevos puestos de
trabajo", añade.
En abril el ministro de Economía, Luis de Guindos, y
el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, sellaron un acuerdo para que
inversores germanos aporten capital a pymes españolas que sean solventes, con
el fin último de reducir el desempleo, especialmente el juvenil.
Endeudamiento en mínimos
El saldo de deuda vivo a los hogares españoles cayó en
mayo un 4,8% con respecto al mismo mes de 2012 y cae a niveles anteriores a la
crisis, según datos del Banco de España. La contracción del crédito a empresas
no financieras fue aún mayor: un 10,9% menos que hace un año. Una prueba más de
que el canal del crédito que conecta a las entidades financieras con la
economía real sigue estrechándose mes a mes.
La tarea de desendeudamiento que tienen encomendados
hogares y empresas se ve favorecida por el tapón en la concesión de créditos
nuevos. Así, la deuda financiera de los hogares españoles se situó en abril en
814.274 millones de euros, lo que supone una caída del 4,8% en comparación con
el mismo mes del año 2012 (855.481 millones de euros) y suma cinco meses
consecutivos de moderación.
Por su parte, la deuda de las empresas no financieras bajó
en abril un 10,9% interanual y sumó 1,111 billones de euros, el nivel más bajo
desde mayo de 2007, mientras que en relación a marzo se anotó un descenso del
0,6%.
Desde los máximos de deuda tomada por
empresas y familias en 2008 hasta ahora la reducción del saldo vivo es muy
severa. En este periodo ha descendido 25,4 puntos de PIB, desde un 171% en 2008
hasta el 146% del PIB actual.