No es una celebración más. Ninguna lo es,
todas tienen ese componente emotivo de regocijo sobre una efeméride que recoge
nada menos que treinta años de "andadura parlamentaria autonómica". Sí, esa que
se pone en duda justo ahora.
El Día de Castilla-La Mancha no viene
este año impoluto, llega con la mácula de la duda. La peor de todas, porque
pone en evidencia su utilidad, eficacia y beneficios. Los de la autonomía digo,
no los de la fiesta, que este año está en Cuenca con los principales
representantes políticos de la región, también la presidenta.
En cualquier caso, llegamos a este día
con el PSOE pidiendo ese "nuevo federalismo" a nivel nacional -para tapar las
diferencias con los territorios nacionalistas-, y con el Parlamento regional
pidiendo la revisión del Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha. Sin duda
el mejor día para una reivindicación asdicos,
???s o progreso con escuelas, centros mrevisiidencia su utilidad, eficacia y
beneficios. í.
Las autonomías han traído progreso y
evolución a muchas regiones del país que, de otro modo, seguirían ancladas en
otra época. A eso lo han llamado "café para todos" en muchas ocasiones. La
verdad es que es según del lado que lo mires, o progreso con escuelas, centros
médicos o carreteras para mejorar la vida de las personas, o el café para todos
llevado al extremo con aeropuertos en cada provincia y estaciones de
ferrocarril de alta velocidad en cada pueblo.
La evolución forma parte de nuestra
existencia. Y al igual que nosotros nos levantamos para caminar de pie, la
autonomía ha llegado a un punto en el que es necesario ver hacia dónde se
dirige, y no sólo dar pasos erguida. La revisión del Estatuto de Autonomía de
Castilla-La Mancha puede que se haya convertido en necesidad, pero si va a ser
ésa la prioridad en la política regional, mejor hacerlo bien, no vaya a ser que
carguemos a la espalda más peso del debido y tengamos una desviación crónica de
columna que nos impida el correcto desarrollo.
Suele ser día de celebración, pero con
las noticias de esta semana parece más bien día de lamentos. 30 años de
autonomía que ahora hay que revisar para integrar más España. Casi nada. Pues
eso, feliz Día de Castilla-La Mancha a todos.
Javier
D. Bazaga
Periodista