La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de
Santamaría, ha justificado que el ex presidente Aznar haya fichado por el
bufete al que su propio gobierno fichó en su día para que le concedieran la
medalla del Congreso de Estados Unidos. Sin entrar en cuestiones éticas y
morales, y rehuyendo absolutamente la polémica, la vicepresidenta ha dicho que mientras
alguien ejerce una actividad política está sujeto a la ley de incompatibilidades,
pero que una vez que han pasado los plazos "cualquier persona puede
dedicarse a una actividad empresarial dentro del cumplimiento de la ley".
Para algunos, no es ni ético ni moral que el ex
presidente del Gobierno
José María Aznar fiche por el bufete DLA Piper, donde
será senior advisor del consejo mundial de la firma para Latinoamérica. Dicen
que no ni ético ni moral porque fue su propio gobierno el que en 2003 fichó por
1,5 millones de euros a ese bufete para que hiciera lobby para que le concedieran
a
Aznar la medalla del Congreso de los Estados Unidos.
El escándalo salió, naturalmente, en la rueda de
prensa tras el Consejo de Ministros, pero la vicepresidenta primera, que este
viernes 'triunfaba' con la Ley de Apoyo a los Emprendedores y su Internacionalización,
no quería polémicas internas y se despachó con la obviedad: "Cualquier
persona puede dedicarse a una actividad empresarial dentro del cumplimiento de
la ley". Es decir, una vez transcurridos los plazos fijados en la ley de
incompatibilidades, cosa que ciertamente ocurre en el caso de Aznar.
Por lo demás,
Sáenz de Santamaría se ha evadido este
viernes con la misma habilidad de siempre de las cuestiones más espinosas. No
ha querido entrar en la polémica que hizo estallar Aznar el martes con su
entrevista en Antena 3, se evadió con total naturalidad de responder si se
sentía afectada por las palabras del ex presidente, no dudo en parapetarse
detrás de la justicia para no decir ni palabra de la
apertura de investigación
fiscal por el juez
Torres de la
Infanta Cristina, y salió como pudo de una
espinosa cuestión: si desde el Gobierno estarías dispuestos a propiciar dejar
de pagar las millonarias pensiones a los ex presidentes del Gobierno cuando se
dediquen a actividades tan lucrativas como las de Aznar... o las de
Felipe
González, aunque nadie citara ese nombre.
Respecto a los 'torpedos en la línea de flotación'
que Aznar dedicó a
Rajoy el martes pasado, la vicepresidenta apeló este viernes
a la
Ley de Emprendedores aprobada por el Consejo de Ministros para contestar a
las críticas del ex presidente sobre la no bajada de impuestos: "Le
contesto con el proyecto que hemos aprobado hoy, la ley de Emprendedores".
En su opinión, en muchas ocasiones la mejor manera de responder es con hechos y
no las palabras, "y este anteproyecto es un hecho".
Sobre si cree que las palabras de Aznar perjudican
a la 'Marca España', Sáenz de Santamaría se limitó a responder que "como Gobierno,
nuestra tarea es beneficiar a la Marca España y con normas como la de hoy
beneficiamos a la Marca España, a los autónomos y a las pymes".
Y en relación a quitar la pensión a los ex
presidentes con actividades tan lucrativas como Aznar, la vicepresidenta
reconoció que no estaba en el orden del día de la regeneración democrática que
se quiere hacer, pero que, como ahora se abre el diálogo con todos los partidos
políticos y ésa es una materia de que necesita amplio consenso, habrá que
esperar para ver.