Redding se lleva una accidentada carrera que terminó en bandera roja

La prueba comenzó con una gran salida de Pol Espargaró (Kalex), que partía desde la séptima plaza tras la clasificación del sábado, situándose segundo tras el primer giro. Takaaki Nakagami (Kalex), por su parte, quiso aprovechar su primera 'pole' y empezó a mandar desde la primera posición.   

Sin embargo, una tímida lluvia comenzó a mojar el asfalto de Le Mans y la curva siete se convirtió en una auténtica pista de patinaje. En el mismo sitio se salieron primero Espargaró y justo después Esteve Rabat (Suter), que iban segundo y tercero a la caza de Nakagami, se iban al suelo.
  

Los españoles se reincorporaron a la pista tras pasar por el 'box' pero volvieron en las últimas posiciones. Mientras tanto, el piloto nipón seguía imponiendo su ley hasta que se salió en la misma curva y se despidió de la carrera.
 

A partir de ahí fue Redding el que tomó el mando y mantuvo una dura lucha con Johann Zarco (Suter), que quería ganar en casa pero se relajó en el último tramo. Durante las últimas vueltas la carrera se volvió imprevisible, con zonas del circuito mojadas y otras más secas. Nico Terol (Suter) también acabó fuera cuando luchaba por la quinta posición.
  

Al final sería el piloto británico quien subiría al primer escalón del podio en su primera victoria de la temporada, justo por delante de Kallio y Simeoen, tras los dos segundos puestos que consiguió en Qatar y Jerez. El piloto español mejor posicionado fue Julián Simón (Kalex) que acabó octavo en una carrera que se suspendió por la lluvia a falta de 4 vueltas para el final.