El vocabulario que casi no ha evolucionado
miércoles 08 de mayo de 2013, 18:10h
Una nueva investigación de la Universidad de Reading demuestra que los
humanos que vivieron en la Europa de la Edad de Hielo hace 15.000 años
podrían haber utilizado las formas de algunas palabras comunes con las
actuales, como yo, tú, nosotros, hombre y corteza, hasta el punto de que
en algunos casos todavía podrían ser reconocidas hoy en día.
Usando modelos estadísticos, el profesor de Biología Evolutiva Mark
Pagel y su equipo planteó la hipótesis de que ciertas palabras habían
cambiado lentamente durante largos períodos de tiempo para retener
restos de las formas utilizadas por nuestros antepasados de hasta 10.000
o más años. Estas palabras apuntan a la existencia de un árbol de
super-familia lingüística que une siete grandes familias lingüísticas de
Eurasia (indoeuropea, Urales, altaica, Kartvelian, drávidas,
Chuckchee-Kamchatka y esquimal-aleutiana).
Anteriormente, los lingüistas se han basado exclusivamente en el
estudio de los sonidos comunes entre palabras para identificar aquellos
que son susceptibles de ser derivados de las palabras ancestrales
comunes, como el pater latín y el padre inglés. Una dificultad con este
enfoque es que dos palabras pueden tener sonidos similares simplemente
por accidente.
Para combatir este problema, el equipo del profesor Pagel mostró
que un subconjunto de palabras de uso frecuente en el habla cotidiana es
más probable que se mantenga durante largos períodos de tiempo. El
equipo utilizó este método para predecir palabras que puedan tener los
sonidos comunes, dando mayor confianza en que cuando se descubren tales
similitudes sonoras no se limitan a reflejar el azar.
El profesor Pagel, de la Escuela de Ciencias Biológicas en Reding,
dijo:. "La forma en que se utiliza un determinado conjunto de palabras
en el habla cotidiana es algo común a todas las lenguas humanas.
Descubrimos numerales, los pronombres y adverbios especiales que son
reemplazados mucho más lentamente con vidas medias lingüísticas de
10.000 años o incluso más. Como regla general, palabras utilizadas más
de una vez por mil en el habla cotidiana eran siete a diez veces más
probables de mostrar ascendencia remota en la superfamilia de Eurasia".
Investigaciones previas del profesor Pagel sobre la evolución del
lenguaje humano ha construido una imagen de cómo han evolucionado
nuestras 7.000 lenguas humanas vivas. El profesor Pagel y su equipo de
investigación han documentado los patrones comunes en la forma en que
utilizamos el lenguaje e investigado por qué algunas palabras tienen
éxito y otras han quedado obsoletas con el tiempo. Esto se hace mediante
el uso de estimaciones estadísticas de las tasas de sustitución léxica
para una serie de artículos del vocabulario de las lenguas indoeuropeas.
"Las palabras ultraconservadas apuntan a una profunda ascendencia
del idioma a través de Eurasia", se publica en la revista Proceedings.