Ríos de turistas caminaban, fotografiaban y hacían interminables colas por momentos en distintos monumentos de Toledo. Era difícil caminar por las calles Comercio y Hombre de Palo y el tráfico en los accesos y salidas de la ciudad fue complicado en ciertos momentos del día, aunque sin retenciones importantes según confirmaba el consistorio.
Desde el Ayuntamiento se calificaba de "inmejorable" la imagen de miles de visitantes en la ciudad que llenaron los aparcamientos tanto los situados en el Casco como en los alrededores de la muralla.
3.500 personas en las oficinas
de turismo
Tanto
en las zonas de aparcamiento gratuito de Safont y Azarquiel como en los
parkings subterráneos del Corralillo de San Miguel, Palacio de Congresos y
Recaredo se producían periodos de un cien por cien de ocupación. Además, por
las oficinas de turismo municipales han pasado más de 3.500 personas tan solo el jueves.