Sevilla-Atlético, la polémica sigue: un protestado gol de Falcao da el triunfo a los de Simeone (0-1)

Con este triunfo, el Atleti mantiene sus opciones de asaltar el segundo puesto la próxima jornada en el derbi del Calderón frente al Real Madrid, mientras los andaluces se alejan de su sueño europeo en la trigésimo segunda fecha de la Liga BBVA. Un Pizjuán, que despidió la Feria de Abril, superaba con dificultades la media entrada y vivió un partido vibrante, vertiginoso, fugaz. Las urgencias obligaron a Unai Emery a plantarse con defensa de tres (Cala, Botía y Fernando Navarro). 

Esas novedades no serían un impedimento para que los hispalenses sacaran a relucir la raza que siempre les ha caracterizado. Cada balón era una pugna, un combate a muerte. No se arrugó, ni mucho menos, el cuadro de Diego Pablo Simeone, curtido en varias batallas. El cariz del partido no cambiaría en la primera mitad, que se esfumó, fue efímera. El duelo en ambas áreas con los delanteros rivales no estuvo exento de polémica. Falcao se las vio con Cala y acabó amonestado. Cada salto conllevaba un choque. 

También se las tendrían Diego Costa con Fernando Navarro, o Negredo con Miranda. No había descanso y, en ocasiones, tampoco acierto. La calidad no brotaba, pero el Atlético se encontró cómodo. La pizarra de Simeone permitió al equipo mantenerse sólido. No existían huecos para los de Nervión. Coke, Alberto y Navas corrían sin poder llegar a línea de fondo. Entonces llegó el trabajo para Beto, que si no tuvo que intervenir, sí estar atento al cerco que los rojiblancos trazaron sobre su área. 

La primera fue de Mario Suárez. Falcao, muy activo y certero, se había revuelto con agilidad en el área. El balón llegó al mediocentro, que golpeó con violencia por encima del larguero. Contestó Negredo a la media vuelta, también desviado. Las ágiles transiciones daban respiro a los madrileños que, sin embargo, no contaron con ninguna ocasión clara. Falcao erró al pasar un balón a Diego Costa cuando él mismo estaba en mejor posición dentro del área. El descanso se acercaba. 

El resultado no quiso moverse. En un partido más casto que bello, al Sevilla se le complicaba minuto a minuto la octava victoria consecutiva en su feudo. Debió darse cuenta su técnico. El Sevilla se personó en el área del Zamora de la competición, Thibaut Courtois, nada más arrancó la segunda mitad, síntoma del discurso de Emery en el descanso. Fue un cabezazo de Coke. Courtois evitó el primero. Después llegaron los centros de Navas y Alberto. 

La rivalidad propia de los duelos frente al Sevilla, el recuerdo de la semifinal de Copa y su carácter, aflorarían en Diego Costa. De sus particulares enfrentamientos surgió una tarjeta amarilla en contra, que le priva de jugar el derbi. Salieron Adrián y Raúl García y el Atlético se rehizo. No podía llegar el tanto sin polémica. Tampoco pudo anotarlo otro que no fuera Falcao. El balón tocó el brazo de Mario Suárez antes de llegar a Adrián. 


 Este puso el balón para Raúl García quien, de volea, remató a portería. El ariete cafetero rojiblanco desvió la trayectoria para anotar su vigésimo quinto tanto en Liga. El gol llegó en los minutos finales. El Sevilla movió ficha. El gol se asomó en Sevilla. Lo intentó Kondogbia desde lejos; Negredo vio larguero, también Rakitic. Pero la mejor defensa de la Liga no contempló encajar goles.

FICHA TÉCNICA.    

RESULTADO: SEVILLA, 0 - ATLÉTICO, 1  (0-0, al descanso).
--ALINEACIONES.    SEVILLA: Beto; Cala, Botía (Maduro, min. 59), Navarro (Baba, min. 79); Coke, Alberto, Kondogbia, Rakitic; Navas, Reyes (Perotti, min. 68) y Negredo.
   ATLÉTICO: Courtois; Juanfran, Godín, Miranda, Filipe; Mario Suárez, Gabi, Koke (Saúl, min. 89), 'Cebolla' Rodríguez (Raúl García, min. 63), Diego Costa (Adrián, min. 68) y Falcao.
--GOLES.    0-1, minuto. 76, Falcao.
   --ÁRBITRO: González González (C. Castellano-Leonés): Amonestó a Botía (min. 36) por parte del Sevilla. Amonestó a Falcao (min. 11), Godín (min. 24), Mario Suárez (min. 57), Diego Costa (min. 59) y Courtois (min. 90) por parte del Atlético.
   --ESTADIO: Sánchez Pizjuán.