Las
medidas serán aprobadas el 18 de mayo en una reunión sectorial en Gijón
El PSOE estudia la obligación de convocar primarias y suprimir la financiación privada a los partidos
- Se
estudian grandes cambios constitucionales para la Conferencia Política de
octubre
miércoles 17 de abril de 2013, 13:47h
La
supresión de toda financiación privada a los partidos y la obligatoriedad para
todas las fuerzas políticas de convocar elecciones primarias son dos de las
grandes reformas que estudia el PSOE de cara a la Conferencia Política que se
celebrará el próximo mes de octubre. Estas medidas, junto a otras como la
reforma y reducción del Senado, o la reforma de determinados artículos de la Constitución,
como el 7, el 30 y el 57, entre otros, además del Título VIII, serán debatidas
el 18 de mayo en Gijón.
De cara
a la Conferencia Política que el PSOE celebrará el próximo mes de octubre, el
próximo 18 de mayo se celebrará en Gijón una importante conferencia sectorial
sobre 'más democracia', en la que se debatirán y aprobarán una serie de propuestas
de gran alcance político. Habrá muchas medidas concretas para la reforma de la
propia Constitución y de Leyes Orgánicas como la de Partidos Políticos y de
Financiación de Partidos Políticos. También se aprobarán reformas del
Reglamento del Congreso de los Diputados para agilizar los debates
parlamentarios y facilitar el control al Gobierno.
Según
ha sabido Diariocrítico de fuentes socialistas, el 18 de mayo se aprobarán en
Gijón algunas propuestas de gran calado para democratizar los partidos
políticos y que recuperen la credibilidad perdida. En concreto, el PSOE
propondrá incluir en la correspondiente ley orgánica la incorporación de las
elecciones primarias como obligación para todas las fuerzas políticas.
Otra de
las medidas, pero esta vez en la ley de Financiación de Partidos Políticos, es
la petición de supresión de todas las financiaciones privadas a los partidos,
de manera que se aumente la transparencia de las cuentas internas y se
dificulten así procesos de corrupción como los que estamos viendo en la
actualidad -caso como el del Gürtel o el de las ITV catalanas, etc.-.
Dentro
de la reforma federal en la que trabaja el partido socialista y que debatirá en
la Conferencia Política de octubre, se plantea también sustituir el Senado por
una cámara de representantes de comunidades autónomas conformada por entre 80 y
90 miembros. La tesis que baraja el grupo de trabajo que coordina el ex
ministro Ramón Jáuregui se plantea como reto el atajar la crisis social, económica, política y la territorial, iniciada a
partir de las aspiraciones soberanistas de Cataluña.
En ese sentido se plantea
la propuesta para transformar el Senado en una cámara de representantes de las
autonomías, similar a la alemana, cuya función será la de coordinar la política
autonómica y participar también en el proceso legislativo en las cuestiones que
tengan especial repercusión en las regiones.
Esa transformación
requiere, claro está, una modificación constitucional, entre otras cosas para que
la nueva cámara este compuesta de entre 80 y 90 miembros, a razón de tres por
cada comunidad autónoma, más uno más por cada millón de habitantes.
Pero habrá otras reformas
constitucionales, según han explicado a Diariocrítico fuentes conocedoras del
proceso. Esas reformas se refieren muy especialmente, entre otros, a los
artículos 7, 30 y 57 de la Constitución, además del Título VII (el de las
autonomías).
Sindicatos, servicio militar, sucesión en la Corona
El artículo 7 dice que
"los sindicatos
de trabajadores y las asociaciones empresariales contribuyen a la defensa y
promoción de los intereses económicos y sociales que les son propios. Su
creación y el ejercicio de su actividad son libres dentro del respeto a la
Constitución y a la ley. Su estructura interna y funcionamiento deberán ser
democráticos".
El establecimiento constitucional de que el ejercicio de su
actividad es libre plantea problemas para incluir a partidos, sindicatos y
fuerzas empresariales en la futura ley de transparencia, según ha reconocido,
por ejemplo, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. Un
cambio en este artículo facilitaría mucho las cosas de cara a la exigencia por
ley de una mayor transparencia pública.
El artículo
30 es anacrónico: establece que "la ley fijará las obligaciones militares
de los españoles y regulará, con las debidas garantías, la objeción de
conciencia, así como las demás causas de exención del servicio militar
obligatorio, pudiendo imponer, en su caso, una prestación social sustitutoria".
La mili dejó de ser obligatoria por ley en tiempos de Aznar, lo que quiere
decir que la ley va mucho más atrasada que la realidad social.
Y en
cuanto a la Corona, el artículo 57 de
la Constitución requiere de una precisión más adecuada de determinadas figuras
de la monarquía, según fuentes socialistas, para incorporarla a la
transparencia y a la equiparación de sexos en el proceso sucesorio.
El artículo
57, en concreto, dice: "La Corona de España es hereditaria en los sucesores
de S. M. Don Juan Carlos I de Borbón, legítimo heredero de la dinastía
histórica. La sucesión en el trono seguirá el orden regular de primogenitura y
representación, siendo preferida siempre la línea anterior a las posteriores;
en la misma línea, el grado más próximo al más remoto; en el mismo grado, el
varón a la mujer, y en el mismo sexo, la persona de más edad a la de menos".