Feijóo: matar al delfín o cómo dañar la imagen del que todos ven como sucesor de Rajoy

Especulaciones, ya saben, ya para todos los gustos. Hay algunas que apuntan a que Mariano Rajoy sólo querría estar unos años más al frente del PP y en las principales líneas de poder, siguiendo los pasos de José María Aznar, quien sólo quiso dos mandatos como presidente del Gobierno. Zapatero, aunque en otras circunstancias, hizo exactamente lo mismo. Así que muchos consideran que Rajoy habría pensado en el también gallego Alberto Núñez Feijóo como sucesor.

En todo caso... ¿por qué esta filtración de las fotos de Feijóo con el narco Dorado? ¿Y por qué justo ahora? Aunque los primeros señalados han sido sus enemigos políticos desde la oposición, ahora cobra fuerza la teoría de que se trataría de una guerra interna con rivales internos en el PP los que han hecho que estas fotografías de 1995 llegaran a la redacción del diario 'El País' para dañar para siempre la imagen de Feijóo.

Ahora también circulan rumores y especulaciones sobre quiénes se sitúan en la línea sucesoria, dando por muerto a Feijóo de cara al futuro. Algunos medios apuntan a Soraya Sáenz de Santamaría, la política cuidada como oro en paño por Rajoy, vicepresidenta y portavoz del Gobierno, dando también por amortizada a Dolores de Cospedal, muy golpeada y desgastada como objetivo de los 'punchs' de la prensa al ser la cara visible del PP para explicar la presunta corrupción del partido, los papeles de Bárcenas y la trama Gürtel.

Ante la prensa

Precisamente el presidente gallego ha dado la cara, como se esperaba de un posible delfín político. No se ha escondido aunque, por supuesto, no ha dimitido. Feijóo dijo a la prensa ayer lunes que no dejará sus cargos, como han pedido los grupos de la oposición, porque actuó "siempre dentro de la ley".

También insistió en que "nunca" firmó, ni adjudicó, ni concedió "ningún contrato con ninguna empresa de este señor". En compañía de otros miembros de la Xunta, dijo que comparecía "por unas fotos de hace 20 años", que no tienen nada que ver con sus responsabilidades como presidente. "No van a lograr que cambie mi actitud ni mi criterio", añadió.

Sobre la publicación de las imágenes, el presidente de la Xunta dijo que el hecho "se dirige directamente contra mí", tras lo que añadió tener la conciencia "muy tranquila", al tiempo que apuntó que no le sorprende la publicación de las imágenes, puesto que conocía su existencia "desde 2003 o 2004", cuando, dijo, se le "advirtió" de que podrían salir "en algún medio de comunicación". Feijóo añadió que tres jueces tuvieron constancia de esas imágenes, advirtiendo de que si hubiera tenido algún problema legal no se habría presentado para liderar el PP gallego ni para presidir la Xunta.

Por lo que se refiere a su relación con Dorado, el presidente de la Xunta dijo que fue "de ocio" y "no directa", incidiendo en que cuando mantuvo contacto con él no había ninguna sentencia condenatoria en su contra. Dicho esto, admitió lo que calificó como su propia "torpeza" e "inseguridad" por "no haber investigado más", tras lo que añadió: "no me van a amedrentar".


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