El consejero de Educación,
Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha, Marcial Marín, ha destacado que este
inmueble tiene su origen en un palacio o casona noble renacentista, aunque su
aspecto actual se debe a la reforma practicada del siglo XX por Ricardo Velázquez
Bosco. Actualmente es la sede del Colegio "Champagnat" de los Hermanos
Maristas.
Para Marín "el interés histórico y cultural del Palacio de la Vizcondesa de
Jorbalán, así como su valor educativo justifican sobradamente la declaración
como bien de interés cultural". En este sentido, ha añadido que "la protección
de nuestro rico patrimonio cultural es la mejor garantía de pervivencia para
las generaciones venideras; un patrimonio cultural e histórico que es seña de
identidad".
El palacio cuenta con un patio interior de
estilo renacentista alcarreño, cuyo origen está en el edificio del siglo XVI.
La capilla, de una única nave, se remata con una esbelta torre. Está rematado
por un bajo relieve del martirio de San Sebastián atribuido al escultor Ángel
García Díez. Tanto el Palacio como la Capilla están profusamente decorados,
combinando elementos propios de distintos estilos por lo que podemos definirlo
claramente como perteneciente al eclecticismo.
Dotado de estilo ecléctico, el
origen del palacio se remonta a una casa noble del siglo XVI a la que pertenece
el patio interior de estilo renacentista alcarreño. Junto a este edificio, se
ubicaba la ermita o capilla de San Sebastián, que acabará vinculándose cada vez
más con el edificio palaciego.
La delimitación del jardín contemporáneo, con
el diseño de Velázquez Bosco es aún perfectamente visible dado que la parcela
sobre la que se sitúa el conjunto apenas ha variado desde entonces; jardín
conocido en la ciudad por las dimensiones de su arbolado. En sus orígenes,
existía una entrada de carruajes desde la calle, donde actualmente se levanta
el número 24 de la calle Doctor Santiago Ramón y Cajal.
El interior del edificio ha sufrido varias
actuaciones hasta adaptarlo a su actual uso escolar, aunque destacan algunas
salas por su especial conservación como son el "salón de baile" y una
salita aneja al "salón de billar" de la planta baja. Son las fachadas
las que conservan sin apenas alteraciones los elementos más interesantes del
diseño de Velázquez Bosco.