Llevamos
ya unos meses trabajando en un ilusionante y esperanzador proyecto en el que
desde el área de Desarrollo Rural de la Diputación Provincial no estamos
escatimando esfuerzos porque creo que el empeño y la confianza es la mayor
fuerza para la consecución de un objetivo. Mi objetivo, el objetivo de esta
Institución, no es otro que recuperar el oficio de resinero que tan unido a
nuestra historia y a nuestras raíces ha estado y que tantos beneficios nos
puede reportar actualmente.
Que
los resineros vuelvan a nuestros montes como forma de ganarse la vida con lo
que ello supondría para el desarrollo rural, la dinamización de la economía o
el posible asentamiento de población en nuestros pueblos sería un logro que nos
traería muchas satisfacciones.
Hace
unos días recibí una llamada que realmente me emocionó. Al otro lado del
teléfono, la voz curtida de Nicolasa se mostraba agradecida por todo el trabajo
que venimos realizando en este campo al tiempo que me transmitía sus recuerdos
de su etapa como resinera. Nicolasa tiene hoy 72 años y por sus manos han
pasado multitud de pinos cuya resinación era su forma de vida, su dura forma de
vida. Y este esfuerzo le fue reconocido en reciente homenaje que tuvo lugar en
Almodóvar del Pinar donde celebramos el I Encuentro Regional de la Resina al
que tuve el honor de asistir. En el mismo, se realizó un pequeño homenaje a las
generaciones de hombres y mujeres que practicaron la resinación en condiciones
nada fáciles y como símbolo de la lucha por la recuperación de este oficio.
Esa
misma renacida ilusión de Nicolasa, natural de Villanueva de Alcorón, es lo que
estoy encontrando en esas personas que hoy andan detrás de poder resinar en
este año 2013. Ilusión en volver a los pueblos, ganas de emprender una
profesión olvidada en esta provincia y orgullo para mirar hacia el futuro.
Cada
paso de una persona joven hacia nuestros pueblos será un pequeño éxito de
todos. La Diputación, en este caso, va a seguir empeñada en sacar adelante este
y otros proyectos que favorezcan el desarrollo rural y, sobre todo, que
supongan una oportunidad de creación de empleo.
Como
diputada responsable, mi ilusión para que este proyecto de sus frutos se está
viendo colmada ya con el contacto con el grupo de personas que está dispuesto a
resinar, con los alcaldes y alcaldesas de los municipios interesados y con los
técnicos de los Servicios Periféricos de Agricultura de la Junta de Comunidades
de Castilla-La Mancha que están trabajando duro por esta causa en la que han
visto futuro para sus pueblos y sus gentes.
Quiero
dar las gracias a todos ellos y transmitir, una vez más, todos mis ánimos y el
apoyo de la Diputación Provincial de Guadalajara que camina de la mano de todos
ellos en la consecución de un objetivo común.
Lucía
Enjuto Cárdaba
Diputada
delegada de Medio Ambiente, Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural en Guadalajara