Es la tercera huelga de jueces que se produce en este país, y en este caso acompañados por los fiscales. Como las dos anteriores, es una huelga por razones puramente profesionales. Queremos la mejora de la calidad de la justicia. Que por una vez se inviertan medios materiales y personales para mejorar este servicio público. Aunque ahora nos encontramos con un ministerio que no dialoga, que ha impuesto un abusivo y desproporcionado sistema de tasas para el acceso a los tribunales, y que pretende desfigurar la independencia del Poder Judicial.
Hacemos huelga porque no queremos que el poder judicial se administrativice, lo que redundará en un perjuicio para los ciudadanos que no tendrán garantizada la idea de que la justicia sea igual para todos.
Hacemos huelga porque vemos injusto que los conflictos de la gente no merezcan una respuesta judicial, al menos en Primera Instancia, sin que tenga que pagarse una tasa por ello.
Hacemos huelga porque si desaparece en la práctica la autonomía y las competencias, especialmente las reglamentarias del CGPJ, en favor del ministerio de justicia, habrá la tentación de que los poderes políticos quieran someter a su voluntad a los tribunales de justicia, y así ser en la práctica infiscalizables
Hacemos huelga porque nos parece bien que se termine con la justicia sustituta e interina, pero si ello va acompañado de la creación de nuevas plazas de jueces, necesarias para evitar las demoras y desatenciones en tiempo a los ciudadanos y sus litigios.
Hacemos huelga para la mejora de la justicia y no la reformas simples de papel normativo ,y que se coloquen en el primer plano de la ocupación de un ministerio y un consejo de ministros que parece atacar de raíz la confianza, la legitimidad y el crédito del Poder Judicial.
ANDRÉS SANCHEZ MAGRO, MAGISTRADO-JUEZ DE LO MERCANTIL DE MADRID
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