De Cospedal pone el foco en el mercado chino

Astuta, sin duda, y mucho, es la presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal. Vamos, que se ha enterado que las exportaciones de vino de La Rioja a China se han incrementado nada menos que en un 700 por ciento en el último año y ha visto la oportunidad del negocio para los viticultores castellano-manchegos.

Sin pensarlo dos veces, la presidenta autonómica y además secretaria general del PP se llevó el miércoles a pasear por las tierras del Quijote al embajador chino en España, Don Zhu Bangzao, para mostrarle los caldos de Valdepeñas y el aceite de Ciudad Real. Vaya, que quiere inundar China de vino y aceite, ahora que los descendientes de Confucio han descubierto que las resacas, con vino, son mejores.

La verdad es que De Cospedal 'trabaja' este tema con ventaja, porque hay que recordar que una de las pocas cosas buenas que hizo el antiguo presidente regional, José Bono, fue quitar el vino peleón que se fabricaba para las tabernas, transformando la 'cantidad' en 'calidad', y eso es lo que, según fuentes de toda solvencia, le ha vendido De Cospedal al embajador chino. Y, por cierto, que hay muchos chinos en China: algo así como 1.300 millones.