Es increíble la historia de
Emilia Soria, la joven madre de Requena (Valencia) cuya noticia habrán leído en las últimas semanas. Si no, aquí se lo resumimos en un momento: esta mujer, hace 5 años y medio, cuando sólo tenía 22 de edad, se vio desesperada con dos niñas al cargo y se encontró
una cartera con la tarjeta de crédito dentro. Acudió a dos supermercados y compró pañales y comida por valor
de unos 200 euros.
Pues bien, ahora Soria
deberá ingresar en prisión en dos semanas, por mucho de que ya ha hecho trabajo social y la persona a la que pertenecía la tarjeta ha exigido que no se actúe contra la joven. ¿La única solución que parece accesible?: una urgente solicitud de indulto o la suspensión o la sustitución de pena por trabajo social.
Ahora el Gobierno tiene en su mano hacer Justicia. La ciudadanía se lo exige. Con tantos ladrones de millones y millones de euros, fortunas defraudadas o cuentas en Suiza, que esta madre se vea
en tal situación por 200 euros... es lamentable. Hay que recordar que diariamente, ladrones quedan en libertad porque no superan el máximo exigido para que se considere un robo penado, sino que se trata de un hurto...
La joven tiene incluso una causa abierta a su favor para pedir firmas en Internet, en el portal
Change.org:
http://www.change.org/es/peticiones/eviten-ingreso-en-prisi%C3%B3n-...