Rubalcaba parece tener
los días contados como líder único del PSOE: han comenzado a
operar fuertes movimientos para crear una especie de bicefalia dentro del
Partido Socialista; es decir, Rubalcaba como secretario general, pero con la apertura
de un proceso interno para elegir en primarias al cabeza de cartel para las
próximas elecciones generales. El movimiento ya venía de atrás, pero ha tomado impulso
tras el desastre socialista en Galicia y en el País Vasco. La guerra interna en
el PSOE se ha vuelto a desatar.
Las riendas de la
renovación las habría empezado a tomar el presidente de la Junta de Andalucía y
del PSOE, tal y como revela
Raúl Heras en un artículo en
Diariocrítico. Y, efectivamente, fuentes socialistas confirman que la incipiente
operación está en marcha, aunque el engranaje no se lanzará más abiertamente
hasta que no se celebren las elecciones autonómicas en Cataluña, el próximo 25
de noviembre. Los socialistas, no obstante, ya cuentan con que los resultados
que obtendrá el PSC de
Pere Navarro van a significar otro desastre electoral,
acaso tan grande como en Galicia o en Euskadi.
Así las cosas, y una vez
conocidos los resultados del PSC,
José Antonio Griñán y otros 'barones' socialistas quieren
en marcha la 'operación recambio'. Según fuentes socialistas dignas de crédito
y no vinculadas al sector 'rubalcabista', Griñán ya se ha puesto en contacto con
tres líderes autonómicos que, junto a él, controlan federaciones claves de cara
a cualquier evento socialista: el citado Pere Navarro, en Cataluña;
Ximo Puig,
en la Comunidad Valenciana, y
Tomás Gómez, en Madrid. Ahora bien, de este trío,
el más débil es, precisamente, Pere Navarro, porque podría saltar como primer
secretario de los socialistas catalanes después del 24-N. De ahí que el
movimiento regenerador se haya ralentizado hasta conocer los resultados de esas
elecciones autonómicas.
Resulta evidente -como
señala
Raúl Heras en Diariocrítico, y nos confirman, por otro lado, fuentes
socialistas vinculadas a este proceso-, si esas cuatro federaciones citadas
unen sus fuerzas y presentan una alternativa conjunta y creíble -el recambio no
tiene por qué ser, precisamente,
Carme Chacón-,
Pérez Rubalcaba no tendrá más
remedio que convocar unas Primarias, que es lo que quieren los cuatro coaligados,
o un Congreso Extraordinario, en el peor de los casos, para conocer el nombre
del futuro candidato a La Moncloa.
El desastre bicefálico de
Almunia-BorrellEl único factor de
desaliento que ha surgido en esas conversaciones es el miedo que se tiene en la
familia socialista a otra experiencia de bicefalia como la que protagonizaron
para las elecciones del año 2000
Joaquín Almunia, como secretario general del
PSOE, y
Josep Borrell, como candidato a la Presidencia del Gobierno para
desbancar al popular
José María Aznar. Ahora bien, desde esas mismas filas se
recuerda que Borrell tuvo que dimitir por el juego sucio que se inició dentro
del propio Partido Socialista -
affaire de los inspectores de Hacienda de
Cataluña-.
Ahora bien, ese 'desastre
bicefálico' no tiene por qué repetirse en la actualidad, sobre todo si Rubalcaba
aceptara de buena gana que él puede seguir como líder del PSOE, pero que no es
ni será el cartel electoral socialista para las próximas elecciones generales.
No obstante todo lo
anterior, las cuatro federaciones citadas parten con un hándicap: si en su día
una buena parte de sus respectivas organizaciones apoyó la candidatura de la
catalana Carme Chacón, ¿también presentarían ahora a esta militante que, según
algunos, sigue originando un amplio rechazo en muchos socialistas?
Chacón no es la
'regeneracionista'; no la única, al menosParece que Chacón no es
la única posibilidad de recambio. Al menos no desde el influyente Partido
Socialista de Madrid (PSM), en cuyo líder, Tomás Gómez, tiene Pérez Rubalcaba
un enemigo irreconciliable. Hay quien está presionando a Gómez a que presente
su candidatura a suceder a Rubalcaba... incluso en el caso de que sea 'sólo' como
cabeza de cartel, es decir, sin Congreso Extraordinario para elegir una nueva
dirección federal. Dicen en el PSM que la renovación no puede hacerse con
quienes estuvieron tan directamente vinculados con los gobiernos de
Zapatero.
Además de avalar así la candidatura de Gómez, ésa es una forma de decirle a Chacón
que en Madrid no cuentan con ella.
Ahora bien, ¿con qué
apoyos contaría Tomás Gómez? Las cosas no están claras, pero no parece que el
líder de Madrid suscite demasiadas simpatías: ni siquiera las tiene en 'toda'
la organización madrileña, y mucho menos fuera. Hay quien apuesta por el vasco
Patxi
López, pese a la fuerte derrota sufrida en Euskadi, pero el ya
exlehendakari
también tiene sus detractores.
¿Una lista de
integración?
Se trataría, en
definitiva, de buscar una lista de integración, pero ¿quién reúne esas
características? Porque otro de los nombres que se citan, el del
castellanomanchego
Emiliano García Page todo el mundo sabe que viene alentado
por el ex presidente de Castilla la Mancha y ex titular de Defensa,
José Bono,
un personaje que última se muestra muy activo, aunque en las sombras.
En todo caso, este
movimiento 'regeneracionista' está aún en pañales, aunque ha originado que la
dirección federal socialista se
bunkerice en la sede de Ferraz, según confirmó
la vicesecretaria general,
Elena Valenciano, tras la Comisión Permanente -que
no Comisión Ejecutiva- reunida el pasado lunes y de la que
Diariocrítico ha
informado en extenso.
No se sabe, por ejemplo,
cuál es la actitud de los dos grandes derrotados en las elecciones del 21 de
octubre, Patxi López y
Pachi Vázquez. Y mucho menos se sabe cómo responderán
otros 'barones' que también han tenido que afrontar una derrota electoral sin
precedentes en sus respectivos territorios, como el extremeño
Guillermo
Fernández Vara. Tampoco se conoce la posición del asturiano
Javier Fernández,
el único, junto a Griñán, que ha aguantado el tipo electoral, pero al que
siempre se ha identificado como hombre de Rubalcaba, asociado por tanto a la
organización de Castilla y León que dirige
Oscar López.
El resto de las
'baronías' también contabilizan como dudas en este peculiar sondeo: Canarias, Baleares,
Aragón, Navarra, La Rioja... En general, no obstante, sus líderes mantienen una
relación fluida con la 'número dos' de Rubalcaba, Elena Valenciano, una de las
mayores impulsoras, junto a
Antonio Hernando, de la
bunkerización en Ferraz de
la actual dirección federal.