El Acto de Imposición de esta condecoración se celebró en la Audiencia Provincial de la capital ciudadrealeña, bajo la presidencia del presidente del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Supremo, Gonzalo Moliner Tamborero, que impuso la Cruz a la Magistrada.
En el acto, togado, estuvieron presentes el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, Vicente Rouco Rodríguez, los vocales del Consejo General del Poder Judicial Concepción Espejel Jorquera, Gabriela Bravo Sanestanislao y Manuel Torres Vela, y el fiscal superior de Castilla-La Mancha, José Martínez Jiménez, entre otras autoridades judiciales, así como otros representantes de los ámbitos civil, militar y Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.
A María Jesús Alarcón Barcos la acompañaron además de su marido y sus dos hijos, un nutrido grupo de familiares y amigos venidos desde la provincia de Córdoba, lugar natal de la Magistrada, que también estuvieron presentes en un acto cargado de emotividad, y en el que Alarcón Barcos repasó su trayectoria profesional, con alusiones a su vocación de Juez desde muy temprana edad, y el recuerdo a las personas que la acompañado durante sus 25 años de profesión.