El pabellón Antonio Magariños, en el que entrenan y juegan todas las categorías inferiores del club de baloncesto Estudiantes y los alumnos del instituto Ramiro de Maetzu será reformado con un millón de euros aportado por el Gobierno regional.
Las obras comenzarán a mediados del próximo noviembre y permitirán renovar estas instalaciones deportivas, que tras el intensivo uso registrado en sus 35 años de vida presentan un "notable grado de envejecimiento", especialmente en la zona de vestuarios y en las instalaciones de electricidad y fontanería, sostiene la Comunidad de Madrid.
El consejero de Deportes Alberto López Viejo, presentó este lunes la primera fase del proyecto, que prevé ensanchar la pista de baloncesto en nueve metros, para que dé cabida a dos canchas cruzadas.
También se instalará un pavimento de tarima de roble de última generación y se renovará la climatización, pintura, fontanería y electricidad del edificio, ubicado entre las calles Serrano y Jorge Manrique, en Madrid capital.
Después, está previsto abordar la segunda etapa de las obras, ya estudiada en sucesivos anteproyectos y que consistirá en la renovación completa de los vestuarios, la creación de un centro médico y de rehabilitación, la mejora del gimnasio y la recuperación de la antigua piscina, además del cumplimiento de los preceptivos requerimientos en materia de seguridad.
Además, una vez finalizada la reforma, el Club Estudiantes podrá explotar los espacios comerciales del edificio a cambio del pago de un canon a la Comunidad de Madrid.