El Tesoro público ha cubierto el 88% por ciento de su
objetivo de financiación
Análisis las subastas del Tesoro: ¿cómo afectan al bolsillo del ciudadano?
lunes 08 de octubre de 2012, 12:01h
En las subastas del
Tesoro nos la jugamos todos. A
simple vista las tan comentadas subastas del Tesoro Público no deberían afectar
a aquellos que no invierten en ellas. Pero la realidad contradice esa primera
impresión. ¿Por qué? Porque el Estado tiene la necesidad de mantener los
servicios básicos (sanidad, educación, infraestructuras, etcétera), pero al hallarnos
en una coyuntura que no genera ingresos, la solución es pagar la refinanciación
de los créditos que vencen en el ejercicio. Por tanto, se calculan unas
necesidades de financiación y esa cantidad se va colocando en diferentes
emisiones a lo largo del año. De no colocarse, el Gobierno tendría que recortar
de esos y otros servicios. Que a todos nos atañen.
En
lo que va de 2012 el Tesoro público ha cubierto el 88% por ciento de su
objetivo de financiación para estos doce meses. Si finalmente ese horizonte se
alcanza, según los economistas, "se transmite una mayor confianza a los
inversores, que pueden desear comprar títulos de deuda española con la seguridad
de que el Estado se la devolverá. Sin embargo, si baja la demanda, y por tanto
crece el interés, aumentan las dudas sobre el préstamo y la solvencia de
nuestro país. Lo que repercute directamente en la economía en general, y en
particular, en un incremento del coste de financiación de las propias empresas".
Y no sólo para ellas, "se encarecen los créditos para todos".
Lo
deseable es que en cada subasta se coloquen el máximo de títulos al mínimo
interés. Más en este momento, en el que la mayor incógnita es si España debe o
va a aceptar la mano tendida del Banco Central Europeo (BCE), que le ofreció la
posibilidad de un nuevo programa de bonos soberanos y acogerse a un rescate
total por parte de los socios europeos. Porque el interés que se paga en la
subasta, sea mayor o menor, lo paga el Estado. Y son los intereses de los
impuestos de todos nosotros. De ahí que lo mejor es que sean lo más bajos
posible. Amén de que al pagar más, el gasto crece por esos intereses, y sucede
lo que hemos visto en los Presupuestos Generales del Estado. Que es inevitable
un recorte draconiano en todas las partidas.
En
cualquier caso, los expertos son optimistas. Estiman que se alcanzará el
objetivo previsto a principios de año. Si bien si el BCE se decide a actuar,
los movimientos especulativos dejarán paso, exclusivamente, a quienes tengan un
verdadero interés en comprar títulos de España.
En
este mes de octubre se debe hacer frente a la
mayor cifra de vencimientos del ejercicio: 29.500 millones de euros. De
momento, en la primera de las cuatro subastas previstas, la del pasado jueves,
se colocaron 3.992 millones -en una emisión de bonos con vencimientos a
2, 3 y 5 años-. Casi el máximo previsto dentro de su objetivo de financiación,
establecido entre los 3.000 y los 4.000 millones de euros. A un tipo de interés
menor en dos de los tramos ofrecidos. Por ejemplo, en los bonos a 2 años fue
del 3,2%. Cuando el pasado mes de julio
lo que se pagó fue un 5,2% en ese mismo tramo.
"Lo
importante es que la economía crezca más que la deuda", señala otra fuente del
sector. Porque si el PIB crece más que la deuda, en caso de déficit, el peso
total de esa deuda sobre el PIB disminuye". La consecuencia de la subida de la
tan mentada prima de riesgo, y del tipo de interés, es que lo presupuestado
para el gasto público (corriente y no corriente), superfluo o no, se lo come
ese aumento. "De ahí que sea fundamental que retroceda, como sea, mediante
reformas, recortes o llámese 'rescate'. Porque
si gastas mucho, hay que pedir mucho y pagar mucho interés".
La
próxima cita será el 16 de octubre. Ese día, España regresará al mercado para colocar
letras a 12 y 18 meses. De momento, se
sabe que cabe la posibilidad de que la zona euro ponga en marcha un seguro para
garantizar parte de las eventuales pérdidas a los inversores en deuda española.
A la
espera de todo y de nada, la semana terminaba con el mensaje amable de la Unión Europea. En palabras de
alto funcionario del Eurogrupo filtradas a la prensa: "Si se examina la
situación actual del mercado, no veo ninguna necesidad de que España pida
ningún tipo de programa". Cree esta misma fuente que España está «muy lejos» de
tener que solicitar un rescate completo como el de Grecia, Portugal o Irlanda.
«Si se analizan los resultados de las últimas subastas, la del jueves fue muy,
muy bien. La situación en los mercados está muy lejos de la que nos preocupaba
hace medio año». Apenas
un respiro hasta el próximo envite: este lunes los ministros de Economía de
la eurozona examinarán la
situación española, pese a que parece que nadie espera la llamada
de auxilio. Es decir, de que se active el mecanismo europeo de estabilidad
(MEDE).