Así lo aseguró el secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Rafael Catalá, quien recordó que, en tanto se buscan dichas soluciones, el Ministerio contribuye a "sostener" estas autopistas con una línea de préstamos participativos y con las denominadas cuentas de compensación.
"Somos conscientes de la difícil y complicada situación que atraviesan nueve sociedades concesionarias, de las que cuatro ya se han acogido a procesos concursales", aseguró Catalá durante su comparecencia en la Comisión de Fomento del Congreso.
Por ello, el 'número dos' de Fomento recordó que el Ministerio "mantiene los préstamos y las cuentas de compensación para garantizar un escenario de sostenibilidad". "En tanto, trabajamos con ellas para concertar soluciones singulares a una situación singular", afirmó.
Fomento destinará 200 millones de euros de los Presupuestos del 2013 para conceder préstamos participativos a estas vías, para que puedan amortiguar el efecto que provocó en sus cuentas el sobrecoste que pagaron por los terrenos sobre los que se construyeron las autopistas.
Este sobrecoste y el desplome de los tráficos como consecuencia de la crisis son los principales factores de la situación de quiebra que afrontan nueve autopistas, cuatro de las cuales ya han solicitado acogerse a procesos concursales.
La Madrid-Toledo y la R-4 Madrid-Ocaña han solicitado el concurso, y la Cartagena-Vera y las radiales de Madrid R-3 Madrid-Arganda y R-5 Madrid-Navalcarnero, el preconcurso.
Las cuatro sociedades concesionarias de estas vías, participadas por grandes constructoras y entidades financieras, suman un pasivo de 2.171 millones de euros y realizaron una inversión para la construcción y puesta en marcha de las autopistas de 3.338 millones de euros.