El primer tramo de ayuda estará disponible así a
finales de julio.
La banca española más cerca de ser rescatada
viernes 20 de julio de 2012, 10:26h
Ayer, fueron Alemania
y Finlandia; hoy, le toca al Eurogrupo y los 30.000 millones de euros llegan en ayudad de la banca española.
Lo que parece una buena noticia, no ha despertado mucho entusiasmo en
los mercados, que ayer nos acercaron un
poquito más al tan poco deseado rescate de deuda pública con tipos de interés
de más del 7% (España pagó casi el 6,5 % en bonos a siete años) y la prima de
riesgo por encima de los 580 puntos. El acuerdo del Eurogrupo será bueno para
el país y para el sistema financiero pero tiene un precio muy alto, como las
exigencias de más ajustes y reformas como las que se aprobaron ayer
en el Congreso de los Diputados con los votos del PP y el de Elena
Valenciano.
Los ministros de Economía de la eurozona tienen previsto celebrar este
viernes una conferencia telefónica para aprobar el rescate bancario de hasta
100.000 millones de euros para España y el memorándum con las condiciones de la
ayuda, tras recibir el visto bueno final de los parlamentos alemán y finlandés.
El primer tramo de ayuda, de 30.000 millones de euros, estará disponible así a
finales de julio.
España podrá
destinar parte de los 100.000 millones de euros a comprar deuda con el fin de
rebajar la prima de riesgo o a una línea de crédito preventiva para financiar
al Estado. No obstante, necesitará la autorización del Eurogrupo, que podría
imponer nuevas condiciones a cambio de la ayuda, según consta en el contrato
que firmará el fondo de rescate con el Estado español, que ha sido filtrado por
el parlamento alemán.
La Comisión
Europea ha asegurado que, en cualquier caso, el principal destinatario de la
ayuda es el sector bancario y que si España quiere que el fondo de rescate
compre deuda debe realizar una nueva petición.
"Para
ser muy claro, los 100.000 millones de euros que la eurozona se ha comprometido
a proporcionar para la recapitalización del sector bancario español van
destinados a este objetivo preciso y no a otros objetivos", ha dicho el
portavoz de Asuntos Económicos, Simon O'Connor.
El rescate
bancario español es el único punto en el orden del día de la teleconferencia
del Eurogrupo. La renegociación del rescate de Grecia y la ayuda solicitada por
Chipre se dejan así para después del verano.
Las
condiciones del préstamo para España ya fueron objeto de "acuerdo
político" en la reunión de ministros de Economía de la eurozona del 9 de
julio y se aprobarán sin cambios. El plazo de devolución será de media de 12
años y medio y el periodo de carencia de 10 años. El tipo de interés se situará
en torno al 3%, según ha dicho el ministro de Economía, Luis de Guindos.
El rescate
se pagará en cuatro tramos a lo largo de 18 meses y dedicará 25.000 millones de
euros para financiar el banco malo en el que las entidades que reciban ayuda
deberán segregar sus activos inmobiliarios tóxicos. La ayuda podría paralizarse
en cualquier momento si España no cumple las condiciones.
LIQUIDACIÓN DE BANCOS.
Para los
bancos problemáticos, el memorándum pide su reestructuración o liquidación. Por
ello, España deberá dar en las próximas semanas nuevos poderes al Fondo de
Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) para cerrar bancos.
Los
accionistas y titulares de deuda subordinada y capital híbrido, como las
preferentes, deberán asumir pérdidas. Sólo se salvan de este reparto de la
carga depositantes y tenedores de bonos sénior. El Eurogrupo ha desoído así la
recomendación del Banco Central Europeo, que ha cambiado de posición y pide
ahora que los titulares de bonos también contribuyan.
Para el
conjunto del sector financiero, la UE exige, entre otras cosas, aumentar al 9%
el capital de todos los bancos, reforzar el poder del Banco de España en
detrimento del ministerio de Economía o la renuncia de las cajas al control que
ejercen sobre los bancos que se crearon a partir de ellas. La Comisión, el Banco
Central Europeo y el FMI vigilarán que se cumplan las condiciones incluso con
inspecciones sobre el terreno.
El
memorándum recoge además las recomendaciones de política económica formuladas
por la Comisión al Gobierno de Mariano Rajoy, cuyo cumplimiento se controlará
"en paralelo" al rescate bancario. Entre ellas se encuentra el cambio
del sistema fiscal, la supresión de la deducción por vivienda o la aplicación
de la reforma laboral.
RECAPITALIZACIÓN DIRECTA
El préstamo se canalizará a través del FROB, que será
además el garante de la ayuda en representación del Estado español. Ello
significa que durante el periodo inicial el rescate bancario computará como
deuda pública.
Una vez que
comience a funcionar el fondo de rescate permanente (MEDE), que se retrasa al
menos hasta septiembre porque el Tribunal Constitucional alemán no se
pronunciará hasta entonces sobre su legalidad, la ayuda se transferirá allí sin
ganar prioridad respecto al resto de acreedores de España.
El contrato
del préstamo recoge por primera vez claramente por escrito que España se
beneficiará en el futuro de la recapitalización directa, es decir, que el
préstamo dejará de contar como deuda y no tendrá que ser garantizado por el
Estado. La condición previa es que se cree un supervisor bancario único en la
UE, algo que los líderes europeos se han comprometido a poner en marcha a
finales de año.
"Una
vez que se apruebe la recapitalización directa para las instituciones
financieras en España, bien se realizarán enmiendas a este contrato para poner
en práctica ese acuerdo o este contrato será sustituido por otros que recojan
la recapitalización directa de instituciones financieras", afirma el
borrador.