El dinero del Eurogrupo, las medidas que anunciará Rajoy y los mineros
lunes 09 de julio de 2012, 08:09h
Auguran los medios
informativos una semana "de acontecimientos", sobre todo en materia económica.
La reunión del Eurogrupo y el memorandum de entendimiento de la línea de crédito
a los bancos españoles con problemas, en
las próximas horas, y la comparecencia de Rajoy
en el Congreso, este miércoles, con las nuevas medidas que ya se
esperan, en lo que algunos ya bautizan como "cuarto paquete de ajustes" del
Gobierno, -IVA, pensiones, desempleo, funcionarios-,.son dos de las citas de
una semana que se anuncia intensa. Es evidente que las cosas no terminan de ir
bien. Relata este lunes El Confidencial que, a sólo unas horas de que tenga
lugar la reunión del Eurogrupo, en la que se reúnen todos los ministros de
Economía de la Eurozona, el Ejecutivo de Angela Merkel ha trabajado durante
todo el fin de semana para definir "la letra pequeña" de su tesis. En
definitiva, desarrollar toda una serie de baterías que permitan a Bruselas acaparar la supervisión
de las entidades financieras, incluso antes de que a través del
Banco Central Europeo (BCE) se desarrollen jurídica y operativamente las
competencias para crear un supervisor bancario común. De esta manera, la
posibilidad de que las entidades financieras españolas que necesitan
recapitalizarse obtengan el dinero de manera directa, sin pasar por el Estado
español, parece remota, tal y como avanzaba este fin de semana el todopoderoso
ministro alemán de economía Wolfgang Schauble, -"el organismo supervisor no
entrará en funcionamiento este año"-, y
de acuerdo a la tesis que defenderá en la reunión de esta tarde Alemania. En
efecto, hasta que ese supervisor único no funcione con garantías, escenario que
no se contempla antes de 2013, el dinero del fondo de rescate tendrá que ser
canalizado desde el FROB, al que se pretende exigirle un reporte mensual sobre el
estado de las entidades recapitalizadas con las ayudas europeas,
de manera que se pueda saber cómo y quién gestiona el préstamo concedido. De
hecho, y aunque Schauble lo negara -"la idea de que el Gobierno español aplica
reformas para satisfacer a Alemania es grotesca; el Gobierno español sabe lo
que hay que hacer y lo hace muy bien"-, da la impresión de que el ministerio de
Hacienda alemán desconfía del verdadero estado de las entidades financieras
españolas. Ni siquiera el trabajo de los evaluadores Oliver Wyman y Rolang
Berger, que han sometido a pruebas de estrés a los balances de las entidades,
parecen ser
garantía sólida para despejar las dudas generalizadas del
equipo económico de Merkel. Además, quedan por saberse todavía los resultados
de las auditorías que las cuatro grandes del sector están realizando sobre los
bancos nacionalizados, cuyo trabajo determinará qué niveles de capital
necesitan para cumplir con las exigencias de Bruselas. Pero, además de la
propia desconfianza natural que la canciller alemana pueda tener sobre la banca
española, la líder conservadora se enfrenta a la opinión pública de su propio
país, donde, cada vez de manera más explícita, se alzan voces críticas sobre el rescate directo a
la banca española. La semana pasada un grupo de casi 200
economistas alemanes publicó un manifiesto en el que detallaban toda una serie
de argumentos para rechazar el rescate directo reclamado por España. En esa misma entrevista
del ministro de Hacienda alemán Schauble, este domingo, en El País
reconocía que la inyección de dinero a
través del fondo de rescate para sanear la banca española es un crédito
concedido al país, por lo que incluye condiciones y contrapartidas, y no una
donación, que implicaría la ausencia de requisitos. El hombre de las finanzas
de Angela Merkel quiso restar importancia al hecho de que tenga que ser el
FROB, y por lo tanto el Estado, el que tenga que asumir el préstamo del fondo
de rescate como deuda, financiado en mejores condiciones que las de mercado, ya
que España trabaja correctamente para reducir el déficit. El planteamiento
alemán aboca a España a realizar la solicitud
de los fondos para el rescate bancario a través del Fondo de Reestructuración
Ordenada Bancaria, y será un dinero que saldrá del fondo de estabilidad
provisional EFSF, a la espera de que esté listo el Mecanismo de Estabilidad
Europeo (ESM). "El EFSF da créditos a los países que lo solicitan, no hace
donaciones. Según las normas de Eurostat, los créditos se suman al
endeudamiento, aunque sean tan blandos como los del EFSF. Hablar sobre qué
sucederá cuando esté funcionando el futuro organismo de supervisión bancaria sería construir castillos
en el aire", subrayó Schäuble.
Todo un aviso de que el Eurogrupo, este lunes, podría ver limitado su
alcance. La semana tiene, además, otra cita crucial, el Consejo de Política
Fiscal y Financiera del jueves. Las Comunidades Autonómicas tienen cita de
"control de cuentas", y parece que hay varias que no superan los recortes
exigidos desde el Gobierno central. Asegura este lunes El Mundo que el Gobierno
amonestará a las CCAA que no cumplan el déficit comprometido y les dará un mes
para adoptar medidas correctoras que eviten ser intervenidas. Finalmente, el
viernes habrá consejo de ministros con "ajustes duros". La Razón habla del
nuevo paquete de ajustes, y destaca dos reformas pendientes: la de la
administración local para acabar con las duplicidades y la reforma energética,
con nuevas tasas nucleares, hidráulicas y renovables...
Pero todo eso es adelantar
acontecimientos de una semana intensa, y probablemente nada fácil. Por si
faltaba algo o alguien, tenemos en Madrid a los "mineros airados", decididos a
convencer a Soria y Rajoy sobre la conveniencia y justicia de sus
reivindicaciones económicas para el sector...