"Se advierte que, a partir de ahora, los familiares deben
suministrar el agua a los pacientes. No viene incluida en la dieta", reza
el cartel.
El PSOE castellano-manchego ha denunciado lo que califica de
"recorte hasta en las más básicas necesidades humanas" y desde CCOO confirman
que lo mismo sucede en otros hospitales como los de Ciudad Real o Albacete.
El SESCAM lo desmiente
El Servicio de Salud de
Castilla-La Mancha (SESCAM) ha desmentido
esta información en una nota de prensa y asegura que "que no se ha producido
variación alguna en las últimas fechas en el suministro de agua a los pacientes
atendidos en planta en toda la red de centros hospitalarios de esta comunidad
autónoma".
El SESCAM deja la pelota en el
tejado de cada hospital al recordar que "como ha sido norma desde hace al menos
una década, cada Gerencia opta por la inclusión o no de agua embotellada de un
modo general en sus dietas, atendiendo a las necesidades de cada hospital".
Incluso va más allá el servicio
sanitario y ofrece datos que apuntan a la anterior gestión del PSOE: "Se ha
comprobado que hasta siete hospitales en la región nunca han dispensado agua
mineral embotellada, desde su apertura y durante el período en que el SESCAM
dependía de gobiernos del Partido Socialista", asegura el comunicado. En
concreto, se refiere a los hospitales de Ciudad Real, Guadalajara, Toledo,
Talavera, Puertollano y el Hospital Nacional de Parapléjicos.
Además, añaden, en los últimos
meses, tanto el Complejo Hospitalario Universitario de Albacete como el
Hospital de Valdepeñas "optaron por facilitar alternativas cómodas para la
provisión de agua fría, sin mayores incomodidades durante el tiempo
transcurrido desde la aplicación del nuevo criterio".
En el resto, el Mancha Centro
(Alcázar de San Juan), según informan, "se acaba de renovar el servicio,
manteniendo el agua embotellada como ha sido habitual", pese a lo apuntado por
algunas informaciones y por la evidencia del cartel que pueden ver en la
fotografía.
En Hellín, dice el SESCAM "fue un Gobierno
socialista quien decidió entre 1996 y 2002 eliminar de las dietas para los
pacientes en planta el agua mineral embotellada, que se repuso desde ese año y
que actualmente también se mantiene". En Villarrobledo, por su parte, se
contempla una botella de litro y medio por paciente y día. Manzanares, Tomelloso
y Almansa también lo incluyen en la dieta general, sin mayores incidencias ni
variaciones, concluye el repaso minucioso sobre el uso del líquido elemento en
las instalaciones hospitalarias de la región.
El SESCAM considera que es un
asunto de "escasa relevancia económica y de nula trascendencia clínica, pero
que utilizado sin rigor puede generar confusión entre algunos usuarios".