Dios los cría y ellos se juntan. Un venezolano como Baute no podía casarse con una malagueña como Bea Mira Hafner. Por suerte para ella él se ha casado con una linda muchachita al estilo venezolana. De las que dicen con dulsura papasito
Si de algo saben las venezolanas es de maquillaje y
peluquería. En aquél país caribeño las mujeres aprehenden desde infantes que
una dama lo primero que tiene que hacer es estar siempre disponible y bella
para su esposo. Las telenovelas enseñaron a las españolas las dulzuras de las
gatas caribeñas siempre despertándose con los ojos bien maquillados y las uñas
con impoluta manicura. Astrid Klisans, la flamante (re) mujer del también
venezolano Carlos Baute, sabe mucho de eso y aunque se dice que es arquitecto
(no se sabe si de interiores o de los otros) de lo que sí sabe es de posar como
una barbie y, además, venezolana.Ha salido perdiendo con el cambio de novia pero lo que él no sabe es que la que ha salido ganando es Beatriz Mira Hafner. Casarse con un hombre porque mueve muy bien las caderas es como casarse con una mujer porque está buena. Idénticas razónes para acabar en Hola contando las razones del distanciamiento.
El reportaje no tiene desperdicio en el interior de la
revista ¡Hola! A pesar del lugar, el Monasterio del Escorial, no se quitó el
acento caribeño. Los aires del eje Miami Caracas estaban muy presentes. El
novio en todas las fotos parece que se va a poner a bailar. Ella es como un
muñequita de porcelana sonriente. El amor que tienen por la familia ambos lo
han reflejado posando con...celebrities. No se entiende bien por qué aunque me
dicen por aquí que es para dar más valor a la exclusiva. Así las cosas posan
con Vicky Martín Berrocal, de profesión diseñadora (exitosa, por cierto),
Valeria Mazza, modelo siempre enamorada y otras celebridades como Boris
Izaguirre (venezolano, por supuesto) o Antonia dell' Ate. Bodorrio sin
desperdicio, desde luego.
Pero no sólo de bodas vive el hombre. También esta semana los
famosos nos siguen dando envidia metiéndose en remojo todo el rato desde la
cubierta de sus yates. Carolina Cerezuela, poco barrigona todavía, no pierde el
tiempo y ya está veraneando con su santo y la niña (para comerses) que tienen en común. Por
supuesto los Grimaldi continúan de vacaciones, esta vez para descansar del duro
invierno esquiando y, además, con anuncio de compromiso de boda. Los Grimaldi
no saben que en España se sacan las revistas del corazón el miércoles y por eso
dieron la noticia el martes no dando así tiempo a publicarlo.Andrea, el hijo mayor de la ex díscola Carolina, se casará con Tatiana Santodomingo. Eso es dar el braguetazo y lo demás son gilipolleces. Si el niño no tenía mucho qué hacer, menos tendrá en un futuro...bueno, eso si su tío Alberto no tira por la calle de en medio y se separa de sosocharlene que parece quee stá todo el día con dolor de hemorroides.
Kiko Rivera y Jessica Bueno son la versión patria de los
famosos en traje de baño. Las lorzas y los pelos son el complemento perfecto.
Ella porque está en estado, él porque continúa en estado de zampar y no mover
un músculo. Esta vez parece que no se pelean. Veremos a ver hasta cuándo.En cualquier caso ella se ha tomado en seiro que tiene que comer por dos. Todo ello en la semana en la que madre de él I.P. se ha sentado en el banquillo de los acusados.
Y, por supuesto, las fotos de las nietas del campechano con
la Roja. Su madre, la princesa, más corta de que el asa de un botijo y la hija
campechana, poniendo la bandera en el balcón de su casa. Si es que dan ganas
hasta de emocionarse. . .