Rajoy anuncia más velocidad en las reformas-recortes
martes 03 de julio de 2012, 08:07h
Más de lo mismo. Mariano
Rajoy vuelve con sus mensajes de
siempre: Estamos haciendo muchas cosas, y las estamos haciendo bien, pero es
preciso seguir haciendo reformas que traerán nuevos recortes y más austeridad.
El resultado final será la vuelta al
crecimiento y a la prosperidad... El presidente del Gobierno, Mariano
Rajoy, dijo este lunes en Sevilla, donde se reunió la plana mayor de su partido
para celebrar la Junta Directiva Nacional del PP, que es tiempo de profundizar
en las reformas. "Hemos hecho muchas cosas, pero ahora toca pisar el
acelerador, vamos a hacer más", anunció en un discurso en el que hizo balance
sobre sus primeros meses de Gobierno. El jefe del Ejecutivo no concretó por
dónde pueden irán esas reformas pero sí apuntó directamente a las comunidades
autónomas, a las que pidió "un mayor esfuerzo en los próximos meses". Un
mayor esfuerzo al que Rajoy se sumará desde el Gobierno para lograr
la reducción del déficit público, el "objetivo capital" del Ejecutivo del que
nadie, dijo, puede dudar. Algo que el presidente quiere conseguir reformando el
"andamiaje del déficit y el endeudamiento" y mediante la creación de unas bases
"sanas y firmes" que permitan el despegue definitivo de la economía española y,
a su vez, la inversión y la creación de empleo. Un trabajo en el que "es
imprescindible perseverar" aunque sea, como reconoció, "el más difícil y el más
ingrato porque lleva grandes esfuerzos y reveses". "No hay alternativa si
queremos ser un país que vayamos hacia un crecimiento sostenido", añadió. "Son
reformas pensadas para ganar el futuro y despejar el horizonte de la economía
española". El presidente señaló que es obligación de España como miembro
responsable de la zona euro trabajar para reducir el déficit público y
conseguir así que "las administraciones puedan liberar recursos para incentivar
la inversión. "Desde el primer momento, el Gobierno ha tratado de frenar la
hemorragia del déficit", explicó. "Y si nadie duda de nuestro compromiso, es
porque estamos haciendo esfuerzos en este sentido. Lo hemos visto en los
presupuestos y lo vamos a ver en los presupuestos para 2013 porque hay que
hacerlo", anunció en lo que se vislumbra como una nueva propuesta de
sacrificios para todos los ciudadanos. Rajoy señaló que la "tarea inmediata"
pasa por resolver los problemas de financiación que afectan a muchas
instituciones españolas. Recordó Rajoy que, en el año 2011, España gastó 90.000
millones de euros más de lo que ingresó, "15 billones de las antiguas pesetas".
Y añadió que el problema no es solo ése, sino que para pedir ese dinero hay que
pedir créditos a los mercados, y hoy no estamos en condiciones de hacerlo. Por
eso, insistió en la necesidad de lanzar un mensaje nítido y claro de que
el Gobierno trabaja para lograr el equilibrio presupuestario. El segundo pilar de las medidas que se deben
emprender de inmediato son, según el presidente del Gobierno, las reformas
estructurales para dinamizar la economía española. Algo que pasa por la reforma
laboral ya aprobada por el Ejecutivo o por el Plan de Pago a Proveedores y
otras medidas, como reducir el exceso de reglamentación que existe a través de
una unidad de mercado en todo el territorio nacional. Todo ello, dijo, "lo
requiere las circunstancias, el empleo y el sentido común".
Sobre la situación del
sistema financiero y el rescate a la banca española, Rajoy señaló que nuestro
país ha llevado a cabo un "ejercicio de transparencia sin parangón" al encargar
a dos auditorias extranjeras el análisis de la banca. Sobre el
rescate, volvió a incidir en que se trata de una "línea de crédito europeo
para borrar cualquier duda sobre el sistema financiero español". "No se trata
de darle dinero a nadie, la UE les hace un préstamo en condiciones favorables
que en su día las entidades financieras tendrán que devolver", explicó. Una
medida que, a su vez, dijo, permitirá que se disipen las dudas sobre sistema
financiero español y que contribuirá a la recuperación del crédito. "Los
españoles tenemos sobrados motivos para confiar en nosotros
mismos", concluyó Rajoy en alusión a los problemas que afrontan miles de
ciudadanos cada día y a los que ha ofrecido su compromiso de "trabajar sin
descanso". "Somos de los que deciden cambiar las cosas y vamos a superar estas
dificultades porque estamos acostumbrados a superarnos a nosotros mismos día a
día". En su intervención en Sevilla, Rajoy se apoyó en el re ciente éxito del
Consejo Europeo para lanzar un mensaje optimista y redoblar su "discurso
reformista". Se felicitó por el resultado de dicho
Consejo, pero aseguró que desde España, "ahora toca pisar el acelerador". "Vamos
a hacer mucho más y lo vamos a hacer bien", dijo, tras advertir sobre las
reformas anunciadas que tendrán su efecto "más tarde". Rajoy apuntó cuatro reformas inmediatas
-energética, la de la Administración, unidad de mercado y organismos
reguladores- y lanzó un mensaje muy concreto a las comunidades autónomas,
casualmente, en ausencia de
todos los presidentes autonómicos de su partido. Rajoy advirtió
de que deberán hacer "un
mayor esfuerzo" en la reducción del déficit. Sin concretar
más allá de su compromiso con la reducción del déficit y la reforma del sistema
financiero, su discurso quiso trasladar optimismo a los españoles. "Yo sé
que las circunstancias
actuales son complicadas", dijo. "No llegamos a esta situación por
casualidad ni por mala suerte, sino porque no se han hecho las cosas bien. Lo saben quienes
protestan ahora por las decisiones del Gobierno. Hay motivos para la
preocupación pero muchos más para vencerla. Pero no hay lugar para el
desaliento, y el primer paso hacia el éxito es saber que tenemos los mejores
mimbres para alcanzarlo". "No me cabe duda de que lo
haremos", insistió. "Quiero
transmitiros aquí que estoy absolutamente convencido de que España tiene un gran futuro". Luego,
agradeció especialmente la colaboración de los españoles en la tarea del
Gobierno: "La actitud de muchísimos españoles me llena de orgullo", y
agradeció a los españoles el ánimo y la confianza con que están llevando esta
situación. "Los españoles tenemos sobrados motivos para confiar en nosotros mismos. Ni
siquiera en los peores momentos hemos perdido la ilusión por salir adelante. No nos vamos a
sentar a esperar que cambien las cosas, vamos a cambiarlas nosotros mismos. Soy
absolutamente consciente de que el
Gobierno no puede hacerlo todo, pero sí puede ponerlo todo de
su parte para que los españoles desarrollen en toda su potencia las capacidades
de los españoles, lo máximo
para que España dé lo máximo de sí". La estrategia es
clara: avisar de los recortes que vienen para dejar de hablar de los que ya
hechos, y de paso preparar la pista de aterrizaje a los próximos.
Más de lo mismo. Más
reformas-recortes, más austeridad, y un futuro feliz que algún día llegará...