Casano, que marcó uno de los goles, fue el mejor del partido
Eurocopa. Italia hace los deberes ante una Irlanda entrenada por el italiano Trappatoni y pasa como segunda de grupo
lunes 18 de junio de 2012, 12:58h
Antonio Cassano llevó a Italia a los cuartos de final de la Eurocopa, marcó el gol que dio el triunfo ante la República de Irlanda -que entrena el exseleccionador 'azzuri' Trappatoni- y sosegó al plantel de Cesare Prandelli, que ha devuelto a su equipo a la pelea por los grandes retos. Italia, segunda de su grupo por detrás de España, cumplió y dejó al margen las especulaciones en el otro choque, el que enfrentó a Croacia y España en Gdansk. Derribó la 'azzurra' las penurias del fútbol transalpino, que tocó fondo en el último Mundial, en Sudáfrica..
El combinado
italiano, que se ha ganado el respeto y la admiración por su tradición e
historial en los magnos eventos, ganó con solvencia aunque no respiró
hasta el final, con el tanto postrero de Balotelli. Italia demoró
su entrada en el partido. Presa de la apuesta en juego tardó en entrar
en contacto con la situación. Cesare Prandelli solo hizo un cambio en su
once. El sacrificado fue Mario Balotelli, fijo titular en los partidos
contra España y Croacia pero con actuaciones irregulares.
Prandelli prefirió la estabilidad de Antonio Di Natale para acompañar a Antonio Cassano. Desorientado en los primeros compases e inquietado por el entusiasmo
irlandés, limitado y carente de argumentos, Italia asió definitivamente
las riendas en el tramo final de la primera mitad. Cercó el área
de Shay Given y en apenas unos minutos multiplicó sus oportunidades.
Primero con un balón que sacó bajo palos Sean Saint Ledger a un remate
de Di Natale tras superar a Given. Después con un disparo de Antonio
Cassano desde fuera del área que se le fue de las manos al meta del
Aston Villa.
No perdonó más el conjunto de Prandelli. Crea
peligro en los balones parados Italia. Andrea Pirlo es un mago en
situaciones como estas. Lanzó de esquina al primer palo y Cassano
cabeceó con acierto. El balón dio en el palo pero botó dentro de la
portería. La angustia desapareció para la 'azzurra'. Cassano, con
tres goles, se convirtió ya en el máximo goleador de la historia de
Italia en las fases finales de la Eurocopa.
Con ventaja alcanzó
el descanso Italia, que mantuvo a Cassano como la gran amenaza. Un
disparo suyo detenido por Given advirtió a Irlanda, que empezó a
achuchar al cuadro de Prandelli tarde, con un tiro poco convincente de
Keith Andrews desde la zona de tres cuartos. El balón, muy centrado,
apenas inquietó a Buffon.
Italia dejó ir el mando del partido a
pesar del escaso empeño del cuadro de Giovanni Trapattoni, que buscó su
honor a base de pases largos y balones bombeados, siempre bajo el
control de Gianluigi Buffon y de la reforzada zaga transalpina. Keith Andrews tuvo la más clara a diez minutos del final con una falta
que lanzó desde la media luna y detuvo Buffon. Aunque lo mejor llegó al
final. Con el gol de Mario Balotelli, sustituto de Antonio Di Natale,
que remató de espaldas un córner lanzado por Alessandro Diamanti, para
sentenciar el partido y dar lustre a la clasificación de su equipo.
-- Ficha técnica:
2 - Italia: Gianluigi Buffon, Ignazio Abate, Andrea Barzagli, Giorgio
Chiellini (Leonardo Bonucci, m.57), Federico Balzaretti, Andrea Pirlo,
Claudio Marchisio, Thiago Motta, Daniele De Rossi, Antonio Di Natale
(Mario Balotelli, m.75) y Antonio Cassano (Alessandro Diamanti, m.63).
0 - República Irlanda: Shay Given, John O'Shea, Richard Dunne, Sean
St. Ledger, Stephen Ward, Aiden McGeady (Shane Long, m.65), Glenn
Whelan, Keith Andrews, Damien Duff, Kevin Doyle (Jon Walters, m.76) y
Robbie Keane (Simon Cox, m.86).
Goles: 1-0, m.36: Cassano; 2-0, m.90: Balotelli.
Árbitro: Cuneyt Cakir (TUR). Expulsó por doble amonestación de
Andrews (m.89) y mostró tarjeta amarilla a Balzaretti, Buffon y De
Rossi, de Italia y a Andrews y O'Shea, de Irlanda.
Incidencias:
encuentro correspondiente a la tercera y última jornada del Grupo C de
la primera fase de la Eurocopa 2012 disputado en el estadio Miejski de
Poznan (Polonia) ante 38.000 espectadores.