Desde luego que la sociedad norteamericana no está para estas imágenes, siempre con un conservadurismo moral extremo. El caso es que una jugada en el partido entre Lakers y Thunder en los play offs de la NBA ha dado mucho de sí: y es que el español Pau Gasol y el nacionalizado Serge Ibaka, compañeros de la Selección nacional, protagonizaron la escena del año más allá de lo deportivo: en el último minuto, y cuando el partido estaba tenso, Pau no dudó en bajar esa tensión bromeando con su compañero en la ÑBA pero rival de cancha.
El problema es que esa broma, para nada ofensiva en otras culturas, ha impactado a muchos yanquis: le tocó los genitales a Ibaka, recordando, cómo no, a esa famosa escena futbolística entre Míchel y Valderrama, hace ya muchos años.