En la toma de posesión
del nuevo presidente del Consejo de Estado
Nueva medida de Rajoy: supresión de entidades y organismos que resulten 'caros'
jueves 03 de mayo de 2012, 13:33h
El Gobierno va a plantear
la supresión de entidades y organismos cuyo coste "resulte desproporcionado"
para los ciudadanos. Lo ha confirmado el propio Mariano Rajoy en su discurso en
la toma de posesión del nuevo presidente del Consejo de Estado, Romay Beccaría.
Rajoy, claro está, no ha especificado que 'entidades' u 'organismos' se
suprimirán, pero sí ha afirmado que serán aquellos que "no resistan una
prueba objetiva de utilidad".
Tampoco ha señalado
Mariano Rajoy en qué consistirá esa "prueba objetiva", ni los baremos
con los que se aplicará, ni se ampliará a las propias comunidades autónomas. En
su discurso, se ha comprometido a buscar la "mayor eficacia en las
instituciones", y en este punto donde soltó otro de los enigmas que
comienzan ya a definir el 'Marianato' con carta plena de naturaleza.
En ese sentido, aunque
sin especificar, dijo que "será preciso arbitrar fórmulas más eficientes,
de coordinación y reparto de competencias, de eliminación de duplicidades
innecesarias, de solapamientos indeseables, con supresión incluso, de entidades
y organismos que no resisten una prueba objetiva de utilidad o cuyo coste
resulte desproporcionado para los ciudadanos".
Es verdad que acto
seguido añadió que ese planteamiento labor no implica "desandar el camino
de la configuración autonómica del Estado", así como tampoco el de
"nuestra inserción en la UE", pero sí insistió en que esta será una
"tarea delicada" para la que ha pedido "la ayuda, la experiencia
y la sabiduría" del Consejo de Estado y del Centro de Estudios Políticos y
Constitucionales.
Al acto de toma de
posesión como presidente del Consejo de Estado de Romay Beccaría, hasta ahora
gerente del Partido Popular, han asistido, entre otros, los ministros de
Fomento, Ana Pastor; Sanidad, Ana Mato; Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, y
Exteriores, José Manuel García Margallo.
También ha estado la
presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, el presidente del
Congreso, Jesús Posada, y la secretaria General del PP y presidenta de
Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, ésta con una chaqueta verde
chillón que no pasó desapercibida. Y uno de los presentes fue el ex presidente
Rodríguez Zapatero, consejero de Estado por la gracia de su anterior título en
el Gobierno, como Aznar o Felipe González.
Defensa cerrada de las
reformas del 'Marianato'
En su discurso, claro, Rajoy,
defendió las reformas que está llevando a cabo porque se asientan en un
"mandato inequívoco" de los ciudadanos en las urnas, según él, aunque
no estuvieran en el programa electoral con el que se presentó a las elecciones
del 20 de noviembre.
En su larga intervención,
apeló al espíritu con el que se realizó la Constitución de Cádiz y dijo que su
ejemplo debe servir de "estímulo" y de "guía" para afrontar
con "valentía, determinación y equilibrio" los "profundos
cambios" que necesita el país, asegurando que estos cambios sólo se pueden
llevar a cabo desde el "espíritu de concordia" que tuvo su "más
elevada cima en la Constitución de 1978".