No hay dinero para
sanidad; sí hay dinero para el ejército
España pagará para el nuevo sistema de vigilancia terrestre de la OTAN
martes 10 de abril de 2012, 11:36h
El ministro de Defensa,
Pedro Morenés, ha anunciado que España formará parte del nuevo sistema de
vigilancia terrestre (AGS) que la OTAN quiere poner en marcha a partir de 2015.
Pero formará parte de la siguiente manera: en un primer momento mediante la
aportación de recursos económicos y con el objetivo de incorporarse después con
sus propias plataformas de vigilancia aérea. Este anuncio se ha producido
después de que el Gobierno confirmara que iba a recortar 'otros' 10.000
millones a la sanidad y a la educación.
En una entrevista en la
Cadena Ser, recogida por Europa Press, el ministro de Defensa ha asegurado que
"España va a estar ahí" y ha explicado que ya se está trabajando en
el modo de "tratar de tener" las plataformas de vigilancia aérea, o
aviones no tripulados, esenciales para el nuevo programa, de los que ahora
carece.
"Cuando las tengamos
probablemente en vez de aportar recursos económicos, aportaremos nuestras
propias plataformas", ha explicado, tras apuntar que este proyecto
demuestra que "hay que ir por delante de los acontecimientos en temas
industriales, eligiendo bien dónde se quiere estar".
Pedro Morenés ha recalcado que
este proyecto de la Alianza Atlántica atiende a una capacidad
"absolutamente importante" y requerida por la Jefatura del Estado
Mayor de la Defensa para "dominar el escenario". "Hoy en día la
defensa parte sobre un concepto de información e inteligencia que se obtiene
vía estos sistemas". Como ejemplo, ha citado la misión de Afganistán,
donde los aviones no tripulados han "facilitado" la operatividad y la
seguridad de las tropas.
La OTAN ha previsto ya
que el sistema AGS contará con cinco aviones no tripulados modelo 'Global Hawk'
que Estados Unidos, Alemania, Italia, Luxemburgo, Bulgaria, Rumanía, República
Checa, Estonia, Letonia, Lituania, Eslovenia, Eslovaquia y Noruega han acordado
adquirir de forma conjunta.
Y su principal base
operativa, que se apoyará en radares avanzados para detectar y rastrear de
forma constante objetos en movimiento, estará ubicada en la base aérea de
Sigonella (Italia) y servirá como base de inteligencia, vigilancia y
reconocimiento conjunto de la OTAN y como centro de datos.
Además, el nuevo sistema
de vigilancia terrestre se complementará con el de vigilancia aérea que la OTAN
tiene en marcha con aviones AWACS. Una vez entre en funcionamiento el AGS, los
aliados podrán tener imágenes en tiempo real de lo que ocurre sobre un terreno
de gran extensión, día y noche, con independencia de las condiciones
meteorológicas.