Sinceramente: no vamos a caer en el argumento fácil de decir que la ex tenista Arantxa Sánchez Vicario ha montado todo este show sobre su familia justo antes de lanzar su libro, una biografía titulada '¡Vamos!'. En el libro, Arantxa repasa su carrera deportiva, pero también su vida personal: infancia y adolescencia, y la difícil relación familiar con sus progenitores que, según ella, le han llevado a la ruina.
Ese oportunismo y sobre todo, su comportamiento ante los medios, nos resulta más que hipócrita. Durante décadas, Arantxa ha sido el típico personaje público alérgico a la prensa, y siempre ha protagonizado encontronazos cuando alguien ha querido saber algo más sobre su vida personal, o su práctica evasiva de afincarse en Andorra para pagar menos impuestos, y no tributar así en el país cuya bandera dice honrarse a llevar en las citas deportivas.
Pues sí, la cita ante los medios de este martes fue hipócrita y esperpéntica. Arantxa no permitió preguntas a los periodistas, que tanto se esforzaron por hacer un buen trabajo sobre la presentación del libro. Pero ella lo único que ofreció fue un show lacrimógeno donde no faltó de nada, digno de un 'Sálvame' o una 'La Noria'. Dijo que tiene que rehacer su vida. Haría bien empezando por atender mejor a la prensa, a la que tanto debe...
4903 | luis reyes ciprian - 28/03/2012 @ 23:49:32 (GMT+1)
creo sinceramente que arantxa tiene todo el derecho de exigir lo que tanto sacrificio le costo,nunca me crei tal unidad familiar se veia venir.ysi como dice ella sus hermanos tienen mas patrimonio que ella ..de donde salio tal?ellos eran unos jugadores mediocres,, q solo se hablaba de ellos en spain no eran nada fuera!!!, y hablo con conocimiento por que soy un gran aficionado a este deporte.ahora ella tiene su nueva familia su marido y sus hijos que deben ser su prioridad,me parece muy justo lo que ella esta reclamando es de sus hijos.y los culpables que paguen lo que no era de ellos.....animo arantxa!!!!
Es muy difícil entrar en problemas familiares, pero creo a Arancha, parece que su familia se ha aprovechado de una niña prodigio y se ha quedado con mucho del dinero que ella ha ganado. Arancha no debe nada a los periodistas, en todo caso son los periodistas los que le deben el haber podido narrar unas gestas deportivas que fué ella las que las consiguió y los deportistas sentaditos desde la grada han narrado. Cuando unos padres son buenos los hijos tienen sentimientos positivos hacia ellos. Da la sensación de que han sido unos padres dominantes y aprovechados. Muy duro para ella. Y con la emoción que tenía es normal que no haya contestado a preguntas de los periodistas que urgarían más en las heridas. Arancha, te deseo lo mejor, nos has dado muchas tardes de gloria y de disfrutar deportivamente.