¿Primarias? ¿Qué primarias?
domingo 12 de febrero de 2012, 17:32h
Candidato Diego Arría. 73 años.
Atacado con gases lacrimógenos y asaltado semanas después por
revolucionarios autodenominados chavistas mientras presentaba su
partido y propuestas en la Universidad Central de Venezuela.
Prácticamente sin posibilidades.
Candidata María Corina Maldonado,
43. Disparada con arma de fuego en una barriada popular de Caracas
mientras hacía campaña electoral presentando las propuestas de su
candidatura. Datanálisis le da entorno al 2% de sufragios.
Candidato Henrique Capriles
Radonski, 39, no ha perdido ninguna elección y hasta batió a
Diosdado Cabello (ver P.S.) cuando se enfrentaron ambos por la
Gobernación del estado de Miranda (2008). Los sondeos le dan un
55.9% de la intención de voto, especialmente tras cerrar un pacto
con otro candidato, Leopoldo López.
Candidato Leopoldo López, 40, alcalde
por mayoría absoluta del municipio de El Chacao, Caracas, durante
dos mandatos. Inhabilitado para cargo público hasta 2014
(posteriormente rehabilitado por unanimidad de la Corte
Interamericana de Derechos Humanos). Curiosidad: es tataranieto de
Cristóbal Mendoza, primer presidente de Venezuela, y tátara
tataranieto de Concepción Amestoy Palacios, sobrina
nieta del mismísimo Simón Bolívar. Será por pedigrí.
Candidato Pablo Pérez, 41,
Gobernador del estado de Zulia, segundo en liza para obtener la
nominación con el 31% de la intención de voto. Propone la lucha
contra el hampa, generar empleo seguro y declarar la guerra a los
insurgentes instalados en la frontera con Colombia.
El Registro Electoral Permanente (REP),
de carácter obligatorio, tiene censados todos los ciudadanos con
derecho a voto. Hasta la llegada del presidente Chávez este registro
podía ser auditado libremente por cualquier ciudadano o institución.
Sin embargo, desde 2001 los Rectores del Consejo Nacional Electoral,
dependientes del gobierno, son los únicos auditores posibles. En las
entrañas informáticas del REP hay unos dos millones de "electores
fantasma" (un elector con varias cédulas de identidad
distintas), hasta siete millones de votos teledirigidos en un censo
que es de 18 millones de ciudadanos. El presidente Hugo Chávez
está imbatido electoralmente desde 1999.
En estas condiciones se realizan las
primarias entre cinco candidatos de 30 partidos de la oposición en
Venezuela, 30 opciones políticas muy diferentes que han sido capaces
de mantener una cierta unidad programática, si bien no ideológica,
de cara a esta convocatoria.
Estas primarias emplazarán de millón
y medio a dos millones de votantes en 3.700 colegios y 7.600 mesas
electorales para elegir al que consideran mejor contendor para
enfrentar a Hugo Chávez el próximo 7 de Octubre.
Los deseos de cambio de la oposición
son de tal intensidad que 30 partidos se han puesto de acuerdo bajo
las siglas MUD, Mesa de la Unidad Democrática, con un programa
troncal común en el que lo más destacable es la definición de la
política exterior: abandonar la ALBA, alejarse de Cuba, restablecer
relaciones con Estados Unidos y recuperar protagonismo en la OEA.
Obviamente, la política interior pasa en todas las propuestas por un
new deal con las empresas e inversores extranjeros y por una
dirección "más occidentalizada" del crudo y, por ende, de
la economía.
La pregunta es si podrá el contendor
luchar contra el presidente Chávez. La respuesta es sí, pero no en
igualdad de condiciones, y eso suponiendo que 30 partidos sean
capaces de mantenerse unidos después de que 28 de ellos queden fuera
de la contienda. Por otra parte, en la más limpia de las lides y con
simples herramientas de estrategia electoral, el chavismo tendrá una
idea muy certera de las fuerzas y apoyos con que cuentan los
opositores y le quedarán todavía siete meses para contrarrestarlos.
Si además el miedo electoral se
expande y la prevención de quemar los registros y los cuadernos
electorales con las filiaciones de los votantes -en las elecciones de
2004 el oficialismo represalió a muchos firmantes de una proclama de
referéndum para revocar a Chávez-, las elecciones no llegarán ni a
categoría de brindis al sol: a los parlamentarios de la MUD que se
presentaron ante los parlamentos de Europa y USA la fiscalía general
de Venezuela los investigó por "violar la Constitución".
Además, el Chavismo movilizará sus
votantes cautivos: ejército, funcionarios, empresas subsidiarias del
estado y las clases más depauperadas que siguen viendo en Chávez al
único que ha sido capaz de enfrentar y acorralar la oligarquía que
les aplastaba. En palabras del propio Chávez, "La MUD es una
amenaza para el país y no vamos a permitir que nos devuelvan al
camino de la violencia y la injusticia".
P.S: Diosdado Cabello,
presidente de la Audiencia Nacional y probable sucesor del presidente
Chávez pase lo que pase y le pase lo que le pase. Un nombre para
tener presente a partir de ahora entre otras cosas porque hasta en el
chavismo tiene detractores.