¡Pobre Navarra!

No me extraña que los dirigentes de Nafarroa Bai comiencen a criticar a los dirigentes del PSOE por su actuación en Navarra. La realidad es que Fernando Puras, o sea el PSOE, ha dejado a Nafarroa Bai, compuesta y sin novio, es decir, sin formar un gobierno de coalición.

En el PSOE andaban divididos, por un lado Rodríguez Zapatero era el principal impulsor del Gobierno de coalición de socialistas y abertzales en la Comunidad Foral, por otra José Blanco encuestas en mano le advertía del efecto que esa coalición podría tener en los votantes del resto de España. Así que Zapatero, a través de Puras, ha estado mareando la perdiz, por si las circunstancias le dejaban un resquicio para la coalición, y en ese marear la perdiz los dirigentes de Nafarroa Bai han llegado a confiar en el presidente convencidos de que la coalición saldría adelante.

Todavía no se ha escrito el último capitulo, de manera que en Navarra puede pasar cualquier cosa, incluso que Zapatero al final decida que Blanco no tiene razón y electoralmente no va a pagar ninguna factura por aliarse con los abertzales navarros. Pero en todo este tiempo el PSOE navarro ha quedado de pena, y Puras es hoy un dirigente quemado, con poca credibilidad.

En realidad, a Puras le pusieron al frente del socialismo navarro porque él sí que estaba dispuesto al pacto con los abertzales, y ahora se encuentra en tierra de nadie criticado por unos y otros. Desde luego la situación política en Navarra no la ha podido gestionar peor, pero no es solo suya la responsabilidad, Zapatero es quién mueve los hilos, para bien y para mal.