El proyecto, denominado "Mars500", comenzó en junio del año pasado. Seis aspirantes a astronautas, un ítalo-colombiano, un francés, tres rusos y un chino, se encerraron entonces en un espacio cerrado que recrea un transbordador espacial.
Simula las mismas condiciones que vivirían en una misión real, es decir, sus comunicaciones con el mundo exterior se limitan al correo electrónico y no tienen ventanas. Tampoco han recibido suministros de de agua y comida, y sus reservas son las que les quedan de cuando "partieron". Así pasarán en total 520 días, unos 18 meses.
Este sábado, y tras 250 días vivieron uno de los momentos más esperados: su llegada a Marte.
Tomaron tierra en el Planeta Rojo tras realizar exactamente las maniobras que habrían de llevar a cabo en el espacio: entraron en el módulo de aterrizaje, se despegaron de la órbita y en aproximadamente una hora tocaron la superficie.
Tres de ellos salieron de la nave y realizaron el primer paseo espacial virtual por un módulo pegado a los que representan el supuesto transbordador, decorado con rocas y arena. Para "caminar por Marte", tuvieron que colocarse unos pesados trajes espaciales.
Entre esos tres estuvo el ítalo-colombiano Diego Urbina, de 27 años, que antes de enrolarse en la misión dijo en conversación con BBC Mundo que su objetivo principal era aprender y ser "parte de la historia de la llegada del hombre a Marte".
"Cuando el hombre de sus primeros pasos sobre Marte, podré decir que yo ayudé en eso, y es algo que me hará sentir muy orgulloso", aseguró.