Cuando este verano el ex alcalde de Parla y líder de los socialistas madrileños,
Tomás Gómez, conseguía batir a
Trinidad Jiménez en las primarias para ser elegido cabeza de cartel de cara a las autonómicas de este mes de mayo, todo parecía en paz. En paz, en teoría. Gómez dijo que incluso ofrecería un hueco a Trinidad y que, como es habitual en estas contiendas internas en primarias, todos son amigos y compañeros de partido.
Pero luego, comprensiblemente, la realidad es otra, y parece que la 'vendetta' política ha empezado. Si bien es cierto que
Jaime Lissavetzky no tuvo jamás rival interno en el PSOE para ser el candidato a la alcaldía de Madrid, su apoyo explícito a Trinidad Jiménez le marcó como miembro del ala socialista de Zapatero. Así que la lectura de la noticia de que Gómez ha impuesto a Lissavetzky la lista de electos para las elecciones municipales está bien clara: la venganza se sirve fría... y en bandeja de plata. ¿Pero dónde se meterá Tomás Gómez si, como apuntan los sondeos, se despeña en las elecciones? ¿Qué futuro político le espera con ZP y
Rubalcaba al frente aún del PSOE, al menos hasta 2012?
Nueva 'batalla' entre los socialistas madrileños que llegará a Ferraz
- Diario e-Xclusivo:
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