La imaginación de América Latina
martes 12 de junio de 2007, 14:46h
Estos días la pequeña localidad cántabra de Santillana del Mar se ha llenado de escritores, periodistas, críticos literarios, profesores y traductores en ‘Lecciones y maestros’, el primer encuentro internacional de literatura iberoamericana, para analizar la obra de tres grandes: José Saramago, Juan Goytisolo y Carlos Fuentes.
Este lunes fue el turno de Fuentes, uno de los escritores mexicanos contemporáneos más influyentes, autor de novelas, ensayos, cuentos, relatos y obras de teatro. Entre sus obras destacan 'La muerte de Artemio Cruz' y 'Terra Nostra'.
La brasileña Nélida Piñon, prologó al intelectual mexicano. Destacó su responsabilidad y su forma de entender la literatura, de la mezcla de su obra y su vida de trotamundos.
Entre anécdotas, Fuentes resumió su concepción de la literatura. Concepción en todas sus acepciones: lo que entiende de ella y lo que hace de ella. Escribe por las noches y a la mañana siguiente desaparece por “la grandeza venida de la fabulación y de la voluptuosidad onírica”, como apuntó Piñon. Sus apuntes se transforman a través de los sueños.
Da toda la importancia a la voz. A no estar en silencio. A la expresión de su tierra: América Latina, que mediante la imaginación puede llegar a hacer de la realidad lo que es y de la literatura la crítica más incomoda del mundo.
Habló de su obra y habló de su vida: de sus abuelas, que le introdujeron en lo que representa el sentido de su vida; de su tío poeta, de idéntico nombre, y de su hijo, el tercer tocayo, con igual dedicación. Todos se fueron, pero aparecen en él, en su obra.