Lorent Saleh, coordinador nacional de la organización Juventud Activa Venezuela Unida (JAVU) y líder del grupo, reiteró que la única condición para levantar la huelga de hambre "es la libertad de los presos y perseguidos políticos".
"Le estamos exigiendo al Gobierno que libere a los presos políticos (...); si realmente quiere diálogo tiene que enviar una señal", que sería la puesta en libertad de esas personas, declaró Saleh a la prensa local.
Los ocho jóvenes quieren además "recordarle" a la Organización de Estados Americanos (OEA) el "compromiso" que adquirió de enviar a Venezuela una representación de la CIDH para que constate presuntas violaciones de los Derechos Humanos por parte del Gobierno del presidente del país, Hugo Chávez.
El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, "asumió hace un año un compromiso público" de enviar a Venezuela una comisión de la CIDH, y en ese tiempo "se ha recrudecido la violación de los Derechos Humanos, la persecución política", dijo el huelguista.
En diciembre de 2009 un grupo de estudiantes levantó una huelga de hambre de 18 días a las puertas de la oficina de la OEA en Caracas después de reunirse con una misión enviada por Insulza.