A veces uno no puede resistirse a la tentación y cuando esto pasa lo mejor es caer en ella. Hoy sólo le voy a dedicar estas líneas a
Tamara Falcó. Estoy impresionada con su ático. Cuando aún no me había pasado la envidia de verla posar con pieles en la finca de su padre, ahora resulta que posa, más delgada todavía, en su ático de los Austrias.
Tamara viene a confirmar lo que nunca me había atrevido a decir públicamente: ser una pija sin oficio tiene su beneficio. Y encima me cae bien. No me lo explico.
A Tamara se le da fatal la cocina. En el mundo de las mujeres famosas hay dos prototipos con respecto a la cocina. Están las que "me encanta cocinar y hacerlo rodeada de toda la familia y además siempre terminamos todos charlando allí" o las "no sé freír un huevo pero sé ordenar al servicio cómo hacerlo". Las primeras, obviamente tienen cocinas enormes, de lo contrario no me explico cómo caben todos los miembros de la familia y, además, se llevan todos súperbien. Qué suerte. Las segundas también tienen una suerte increíble porque siempre tienen personas de servicio enseñadas en los mejores fogones de España. O estas explicaciones son ciertas o mienten como bellacas.
Hablando de su nuevo novio dice, cómo no, que ha encajado a la perfección. Lógico y normal, Tamarita. Lo que de verdad me llamaría la atención es que una de estas chicas falcós, goyanes...dijera algún día: "mi novio no es del gusto de mis padres porque tiene taruajes y es bastante macarra pero a mí me la refanfinfla y estoy con él. Pasremos solos la navidad porque nadie nos recibe en casa". Esos sí serían unos buenos titulares.
Dice Tamara que echa de menos las comodidades que tenía en casa. Pero que nadie se preocupe. Tamara no tiene que pasar la mopa ni el aspirador. Simplemente que ahora no tiene mayordomo ni jardinero ni chofer ni nany ni cocinera, sólo tiene a alguien que la ayuda (que se lo hace todo, vaya) pero no es lo mismo. Y ése alguien es una mucama enseñada en casa, es decir, en la casa de su madre.
A Tamara le gusta ordenar, eso dice ella. No aclara si es ordenar armarios o se refiere a ordenar que haga cosas aunque me inclino a pensar que ella es más de ordenar cajas y ropa que ya no usa y colgarla en otros armarios por colores.
He echado de menos, ya que tiene nuevo novio, frases típicas de Hola y de chicas monas. Ya de paso pongo otras que en un futuro sí que dirá:
-"Me imagino la casa en un futuro llena de niños correteando por ahí" si comentarios
-"Me gustaría tener tres niñas para ponerles muchos lazos pero también un niño" bueno, vale
-Creo en el matrimonio para toda la vida y sé que cuando me case será para siempre (en este caso Tamara no puede añadir lo de "mis padres siempre se han amado y son un ejemplo")
-"Mi secreto de belleza consiste en beber mucha agua y dormir ocho horas" (obvian los tratamientos de belleza carísimos que se hacen)
-"No tengo ningún secreto para estar delgada. Es genética. Después de cada parto el cuerpo vuelve a su sitio sin problemas. Además me pongo en forma corriendo detrás de los niños por la casa" ¡¡¡¡JA!!!! Of course, no hablan de las hojas de lechuga que cada día ingieren como único alimento y del entrenadro personal que las machaca dos horas diarias.
Es inevitable, se nos ha hecho mayor.