Según las proyecciones de los medios de comunicación, aunque los republicanos obtuvieron más puestos en la Cámara Baja, no pudieron obtener el control del senado. Los demócratas consiguieron mantener una serie de escaños clave en el congreso.
En estas elecciones estaban en juego también 37 gobernaciones, los republicanos registraron avances y arrebataron a los demócratas varias gobernaciones, incluyendo la de Nuevo México donde Susana Martínez se convirtió en la primera mujer gobernadora de origen hispano en ese país.
Por su parte, el republicano Marco Rubio, una de las estrellas del movimiento ultraconservador estadounidense "Tea Party", se convirtió en senador por Florida, siendo ahora el segundo hispano en la Cámara Alta. Además, los californianos rechazaron la propuesta para la legalización del cultivo, el comercio y el consumo de marihuana.