Al-Faifi estuvo preso en Guantánamo tras ser detenido en Afganistán. En 2007 fue liberado y, tras realizar un programa de rehabilitación de insurgentes en Arabia Saudí, se unió a Al Qaeda en Yemen.
Hace dos semanas, contactó con las autoridades saudíes desde el país vecino diciendo que quería entregarse. Según YemenOnline, a cambio de no ser detenido ni investigado, Al-Faifi -que ocupaba el número 20 en la lista de Arabia Saudí de los terroristas más buscados- les habló del plan de Al Qaeda.
Varios líderes tribales, también bajo condición de anonimato, han confirmado el papel de Al-Faifi en el descubrimiento de la trama.
El terrorista arrepentido dio la pista decisiva para detectar los explosivos y, según AP, la información de Al-Faifi podría ser además la causante de la advertencia que los servicios secretos saudíes emitieron el mes pasado sobre el riesgo de un atentado de Al Qaeda en Europa, especialmente en Francia.
Las autoridades estadounidenses explicaron que una alerta de Arabia Saudí llevó el viernes al descubrimiento de los dos paquetes explosivos, con destino a una sinagoga de Chicago, en sendos aviones en Gran Bretaña y Dubai.
La amenaza 'ha crecido', dice Cameron. "En un momento en que el que estamos involucrados en Afganistán por oponernos a los terroristas, la amenaza proveniente de la Península Arábiga y, en especial, de Yemen ha crecido", ha dicho este lunes el 'premier' británico, David Cameron, tras una reunión de urgencia de su gabinete sobre la amenaza terrorista.
"Claramente debemos hacer todo lo posible para trabajar en colaboración con nuestros socios en el mundo árabe con el fin de erradicar el cáncer terrorista que se oculta en la península arábiga", añadió el primer ministro.
Al Qaeda en la Península Arábiga es sospechoso del atentado frustrado. Según presumen miembros de la investigación, detrás de los dos paquetes explosivos podría estar el artificiero Ibrahim Hassan Tali al-Asiri, sospechoso también del dispositivo del atentado fallido de Detroit de las pasadas Navidades.
Aquel explosivo contenía 80 gramos de PETN, utilizado como componente para explosiones industriales. Las bombas detectadas este viernes contenían 300 g y 400 g de este explosivo, según han confirmado fuentes gubernamentales alemanas. Si hubiesen explotado, "habrían causado daños considerables" y crecen las sospechas de que podría haber más paquetes con explosivos que aún no han sido descubiertos.