"Con la decisión "adoptada por el máximo órgano del Partido Socialista Obrero Español de designar al actual Alcalde tránsfuga de Benidorm como candidato para las próximas elecciones municipales, el PSOE incumple uno de los compromisos más importantes contenido en el Pacto Antitransfuguismo, concretamente el que hace referencia a no presentar como candidatos a concejales y alcaldes tránsfugas", afirma el vicesecretario general de Política Autonómica y Local del PP,
Javier Arenas, en una carta remitida a
Rodríguez Zapatero en su doble condición de presidente del Gobierno y de secretario general del PSOE, partido que, según Arenas, ha incumplido con el Pacto Antitransfuguismo.
Arenas no se ha andado por las ramas: "Usted mismo, en declaraciones recogidas por el diario
El País el 17 de enero de 2010, dijo textualmente 'aplicaremos estrictamente el Pacto Antitransfuguismo'". Evidentemente ni han cumplido el Pacto, ni usted ha cumplido su palabra".
El dirigente popular le dice a Zapatero que "los hechos acontecidos en Benidorm son, en expresión de la Comisión de Expertos del Pacto 'el exponente más claro del concepto de transfuguismo'. La gravedad de este caso se incrementó además por la implicación de la dirección federal del PSOE y de su ex secretaria de Organización, Sra. Pajín, en la conformación y presentación de esta Moción de Censura".
Como consecuencia, Arenas le dice al presidente del Gobierno que "entendemos que con esta decisión, sin duda avalado por usted como secretario general, el Partido Socialista Obrero Español ha decidido romper y dar por concluido el Pacto Antitransfuguismo". Es decir, se confirma la ruptura del pacto y el regreso a la ley de la selva: cada uno hará en las corporaciones locales y autonómicas lo que crea más necesario para sus intereses, buscando tránsfugas que volverán aún más inestable la situación política española. Es lo que se deduce de la ruptura de este pacto.