Canal Sur dejó caer la semana pasada que
Gaspar Zarrías iba ser el sustituto de
Celestino Corbacho en el ministerio de Trabajo. Fuentes de la Moncloa lo desmintieron de inmediato. Pero lo más anecdótico de todo es que el secretario de Estado de Cooperación Territorial se enteró de la ‘noticia’ porque le llamó su mujer desde Sevilla para que le confirmara si iba a ser ministro -¿qué mejor 'fuente' que él?-, como acababa de asegurar la televisión pública andaluza. Al número dos de
Chaves, que en ese momento estaba en el Congreso en plenas negociaciones con Coalición Canaria para cerrar el acuerdo presupuestario, debió de darle un vuelco el corazón, pero tuvo que contestarle a su señora que “no sabía nada” y que él seguía enfrascado en lo suyo.
Pese a que Moncloa lo desmintió, Zarrías no desfallece y este mismo fin de semana no ha tenido empacho en decir que no tiene “ningún problema” en aceptar ‘el marrón’ que supone llevar las riendas de esta cartera si Zapatero le llama porque “en momentos difíciles hay que estar a las duras y a las maduras”. Claro que también ha confesado que por el momento el presidente no le ha dicho ni pío y no tiene “ni la más remota idea” de quien ocupará el cargo que deja vacante Corbacho. El misterio, pues, continúa.
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