El informe sobre ‘El impacto de la formación en las retribuciones 2010’, elaborado por la consultora de Recursos Humanos ICSA pone cifras a la brecha retributiva entre los trabajadores según su formación.
Desde que se entra en el mercado laboral las diferencias salariales se hacen patentes. Un trabajador de entre 24 y 30 años con Formación Profesional cobra de media 15.661 euros anuales, mientras con la misma edad con un Máster o Postgrado se cobra de media 29.143 euros anuales. También hay distancia entre los diplomados y los licenciados. Los primeros reciben unos ingresos anuales de 24.484 euros y los segundos 27.048 euros.
La formación de posgrado comienza a ser un factor cada vez más determinante en el recorrido retributivo, aunque las principales diferencias se producen entre los universitarios y los no titulados, explica Ernest Poveda, director general de ICSA Grupo.
Según avanza la experiencia laboral, la brecha retributiva se convierte en un abismo. A partir de los 50 años, un titulado de postgrado gana 77.896 euros; sin embargo, el empleado con formación más básica ingresa 27.237 euros, casi tres veces menos.
Al final de la vida laboral, en un supuesto de un empleado que haya comenzado a trabajar a los 24 años y termine a los 65 años, el titulado gana 2,5 veces más que el trabajador con menos formación.
Según se desprende del estudio la crisis económica no ha tirado a la baja los salarios, pero sí ha provocado una congelación que afecta sobre todo a las categorías laborales más bajas, a los trabajadores menos formados. El resultado es que entre los sueldos de los trabajadores con título universitario y los no titulados se amplía la diferencia. El ‘gap’ en 2007 era del 49%; en 2010 ha pasado al 58%.
Para Poveda “los indicadores sugieren que las personas con más formación siguen aguantando mejor la retribución en tiempos de crisis y la tendencia se incrementará en el futuro”.