La inmediata condena latinoamericana al fallido golpe de Estado que en Ecuador llevaron adelante un sector de la Policía y parte de las Fuerzas Armadas, es una contundente muestra de la solidez del sistema democrático en la región. Nuestra solidaridad es con el pueblo ecuatoriano por las difíciles horas que está viviendo y en defensa de las instituciones. Bajo ningún concepto un argumento sectorial puede poner en riesgo la democracia.
El reclamo de la Policía ecuatoriana, por un recorte presupuestario, fue sólo una excusa para alterar el orden institucional del país hermano. No podemos ni debemos permitir que las democracias sean cuestionadas en ninguna nación de Latinoamérica, por eso es importante destacar el respaldo unánime al presidente Rafael Correa y al pueblo ecuatoriano que les dimos los distintos bloques parlamentarios, y también la solidaridad que mostraron los Presidentes de la región, dejando de lado los diferentes matices políticos.
Durante años nos privaron de gozar en libertad del sistema democrático, pero desde 1983 se ha afianzado la democracia en toda Latinoamérica, único modelo capaz de dar respuestas a las demandas sociales y políticas de la sociedad. Únicamente el pueblo, a través del voto, puede decidir quién es el encargado de dirigir los destinos de un país. No sólo debemos valorar la democracia, debemos defenderla en toda la región porque es la garante de la unión de los pueblos, de una justicia igualitaria, del bienestar general y de asegurar los beneficios de la libertad.
Silvana Giudici
Diputada Nacional por la Unión Cívica Radical